Origen del Acróstico

Con respecto al origen etimológico de la palabra “acróstico”, los especialistas han señalado que esta proviene de un vocablo griego, compuesto a su vez por dos partículas: ákros, voz que puede ser traducida como “extremo”; y stikhos, la cual puede ser traducida como “verso”. De esta forma, el término “acróstico” significaría entonces literalmente “verso final”, por lo que algún poeta ha apuntado que esta palabra guarda en su estructura su definición.

Por su parte, el origen histórico de este tipo de composiciones poéticas suele estar ubicado en el seno de los poetas provenzales. Sin embargo, existen investigaciones que arrojan que aun cuando fueron los trovadores en Lengua provenzal los primeros en cultivar el género, en realidad estos lo aprendieron directamente de poetas castellanos, por lo que sería entonces la Lengua Castellana en ser la primera en acunar este tipo de composiciones, que han sido usadas también por los poetas de algunos movimientos poéticos, que pretendían romper con la tradición establecida, como fue el caso de las vanguardias.

Definición de familia

En cuanto a la familia, ésta es considerada como el núcleo primordial de la sociedad. Así mismo, se podría definir como un grupo de personas, entre los que existen lazos filiares y sanguíneos, en nombre de los cuales procuran mantenerse juntos, o al menos cercanos, profesándose sentimientos de amor, respeto, fraternidad, entre otras emociones que procuren la convivencia armoniosa y el trato positivo. Igualmente, como célula fundamental de la sociedad, los estados e instituciones internacionales han indicado la necesidad de proteger este colectivo humano, a fin de garantizarle sus derechos.

Acróstico de Familia

Regresando a los acrósticos, en la actualidad existe una tendencia a usar este tipo de construcciones poéticas, a fin de difundir ciertos atributos o valores, con respecto a determinadas entidades. En este sentido, resulta natural entonces encontrar acrósticos compuestos en base a nombres propios de personas, empresas, instituciones, países, ciudades e incluso apellidos de familias, en donde el autor busca ante todo transmitir los rasgos positivos y únicos de estos sujetos o entes.

No obstante, también destacan casos en donde el acróstico se encuentra inspirado en el nombre de algunos valores, a fin de procurar la difusión de estos y sus características. Así mismo, puede suceder también que se compongan teniendo como modelo a uno de los elementos sociales más importantes. Al respecto resulta pertinente entonces traer a colación un acróstico que tiene como base la institución social de la familia:

Faro en medio del mar del mundo.
Amor y apoyo en todo momento.
Mandala de paz y armonía, que mantiene la
Ilusión viva y
Latente.
Íntimo espacio de todo ser, en donde el
Amor ofrece cobijo, comprensión y apoyo, sin pedir nada por ello.

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