Sin embargo, hoy sabemos que la mayor parte de estos gigantes son filtradores, y se alimentan de animales extremadamente pequeños, como las sardinas, los arenques o el krill. Más interesante aún, como han evolucionado para alimentarse de estos pequeños animales, no son capaces de tragar cosas mucho más grandes. De hecho, su garganta es tan pequeña que si intentaran comerse a un ser humano, se ahogarían.

Y por esta razón, precisamente, es que dichas leyendas son falsas: no hay ballenas que coman seres humanos.

Sin embargo, esto no quiere decir que una ballena no pueda intentar comerse a una persona. Sus gargantas pueden ser pequeñas, pero sus bocas son gigantescas, y en ellas cabría con facilidad una familia entera. Si alguien fuese tan desafortunado para estar en el camino de una  ballena cazando su cena, bien podría encontrarse con que el animal intentó comérselo.

Y esto fue precisamente lo que le pasó a un camarógrafo de la BBC en los mares nórdicos europeos.

Tragado por una ballena                              

El camarógrafo se encontraba filmando para el documental Blue Planet II cuando de repente su mundo se oscureció. Ballenas que pesaban decenas de toneladas pasaron a toda velocidad a su lado, algunas esquivándolo por apenas unos pocos metros, mientras se alimentaban de peces. Los animales, a pesar de su gigantesco tamaño y de la velocidad a la que iban, fueron capaces de maniobrar para esquivarlo.

Si hubiera sido golpeado, el camarógrafo estadounidense Patrick Dyskra seguramente estaría muerto. Y si hubiese sido tragado, no se sabe exactamente que habría sucedido. Pero afortunadamente para él, los buenos reflejos de la ballena salvaron su vida… y le brindaron una toma fantástica.

Fuentes:

1. https://www.dailymail.co.uk/news/article-5038487/Blue-Planet-II-cameraman-nearly-swallowed-whale.html

Imagen: abcnews.go.com