La Bóveda Global de Semillas de Svalvard
Conocida popularmente como la “Bóveda del Fin del Mundo”, la Bóveda Global de Semillas de Svalbard fue una iniciativa ideada y financiada por el gobierno noruego que tiene como objetivo garantizar la seguridad alimentaria de la humanidad en la eventualidad de una catástrofe (como una Guerra Nuclear). El banco guarda seguramente más de un millón de muestras (hace 2 años eran 890.000) de más de 4.000 especies de plantas domesticadas que podrían ser vitales para una rápida recuperación de la capacidad productiva mundial.
Es necesario aclarar que el banco no guarda semillas “únicas”. Lo que hace es almacenar “copias” de los llamados “bancos genéticos” que hay en los diferentes países: así, cuando algo destruya el Banco Genético, las semillas no se perderán. La mayor parte de los países dona voluntariamente copias de sus semillas al banco, que solo las almacena bajo el auspicio del gobierno noruego y varias fundaciones (entre ellas la de Bill Gates).
La petición desde Medio Oriente
Hoy, por primera vez desde su creación, el Banco ha tenido que abrirse para sacar algunas semillas. Se trata de copias genéticas de semillas perdidas en Alepo, Siria, debido a la incesante Guerra Civil que desde hace 3 años asola el país del Medio Oriente. Parece ser que en algún momento de la confrontación se dañaron seriamente las instalaciones del centro, lo que llevó a la pérdida de algunas semillas.
El Banco Genético de Alepo era extremadamente importante en el contexto de la región, pues brindaba semillas a muchos de los agricultores de varios países, desde Turquía hasta Irak. Cuando los combates comenzaron a volverse más y más duros, el centro fue trasladado a la ciudad de Beirut, en el vecino Líbano, pero muchas de las semillas allí almacenadas se perdieron.
Es por esto que el Banco envió una solicitud para que la llamada Bóveda del Fin del Mundo se abriera, por primera vez, y les brindara 116.000 muestras que ellos habían llevado allí, o 130 de las 325 cajas que donaron al banco.
La Bóveda, atenta a las necesidades de Oriente Medio, accedió a la solicitud, pero todos esperan que una vez el Banco de Beirut se “reabastezca” brinde, de nuevo, semillas a la Bóveda. Esto ilustra la importancia de dicha Bóveda y la necesidad de que la iniciativa, libre de todo interés más allá que el de la seguridad alimentaria, se mantenga.
Fuente de imagen: drosophila.es