Considerada como una de las siete maravillas del mundo moderno, con 21 mil kilómetros de longitud, que abarca desde la frontera que separa a Corea, hasta el caluroso desierto de Gobi, pasando por el río Yalu: la Gran Muralla China, erigida por una de las civilizaciones más antiguas de la humanidad. Grandes secretos se esconden alrededor de esta enorme mega-pared; en seguida, algunos de ellos:
“Está construida con huesos”
Es uno de los mitos que durante años ha prevalecido. Pero hay muchos que aseguran que es falso y que los únicos elementos que emplearon para su constricción, fueron ladrillos, piedras y granito. Se dice y muchos lo han creído, que como murieron tantos obreros en la construcción, sus restos fueron mezclados con los materiales.
Un tercio de la Gran Muralla China ha desaparecido
Esos son los datos que arrojan estudios recientes, que evidencian el deterioro que ha ocurrido por el pasar de los siglos en esta súper estructura ancestral. Según esos cálculos, sólo se ha mantenido en buenas condiciones cerca de un 8% de la muralla original, levantada en plena dinastía Ming, en el año 1360. Los mismos habitantes del país del dragón naciente se encargaron de causarle el mayor deterioro, por robar grandes segmentos, para luego venderlos como si fueran ladrillos.
Uno de los primeros historiadores que habló sobre la Gran Muralla, fue Juan González de Mendoza (1545-1618), quien trajo esa información al mundo occidental, en el año 1600. Escribió un importante libro en el que detallaba los distintos ritos, costumbres y folklor chino. Sin embargo, nunca conoció aquella nación en persona, sólo se basó en recopilar relatos.
La Gran Muralla China no es una sola, sino varias
Es todo un conjunto de murallas, de las cuales la más famosa es la de Badaling, en las proximidades de Pekín, que se erigió durante el periodo de la dinastía Ming. Las demás se fueron construyendo progresivamente en otras dinastías.
Es falso que se pueda ver desde el espacio
Desde los años 50’s, se masificó el mito de que una de las construcciones terrestres que era factible ver desde el espacio exterior, como por ejemplo desde la Luna, era la Gran Muralla China. Pero con la llegada del hombre al satélite natural, se desmitificó bastante, aunque todavía hoy prevalece la creencia en muchos.
Un astronauta llamado William Pogue afirmaba que podía divisar la tremenda muralla desde el Skylab, pero luego se supo que en realidad se trataba del Gran Canal de China, otra obra arquitectónica de grandes proporciones.
La NASA ha asegurado que ni si quiera se ve desde una órbita baja, puesto que se requeriría una condición climática exclusiva y una vista de un humano multiplicada 21 veces por su capacidad.
Sección perdida emerge de las aguas
En el año 2016, de acuerdo con los reportes oficiales, luego de 40 años de permanecer bajo el agua, emergió nuevamente a la superficie una fase de la Muralla, debido a las fuertes sequías y al aumento de actividades hídricas.
Captaron nave extraterrestre sobrevolándola
Ocurrió en 2018. Varios usuarios de Google Maps reportaron que habían captado un objeto volador no identificado, muy similar a los de otros cientos y miles de avistamientos que se han venido produciendo, en inmediaciones de la Gran Muralla y en diversas partes del mundo.
Los usuarios de la plataforma detallaron que era una especie de nave luminosa. No demoró nada en virilizarse y generar toda una serie de impresiones entre los navegantes de la web.
Está hecha de arroz triturado
Un docente de Química, que labora en la universidad de Zhejiang, llamado Zhang Bingjian, efectuó una compleja investigación, donde dice demostrar que uno de los grandes hitos de la tecnología del tiempo en que se construyó la Gran Muralla, era el empleo de arroz triturado para construir pagodas, edificios y templos y a eso se le debería que hayan podido resistir tanto al paso de los siglos, con terremotos y otros factores metereológicos.
El profesor Zhang añade que la mezcla completa era con el carbonato de calcio, como activador de la amilopectina, un carbohidrato muy característico del arroz y otros alimentos.
El paso del tiempo parece ser implacable con todo y con todos y la Gran Muralla China no ha sido la excepción. Muchos misterios se esconden allí.
Imagen: wikipedia.org