El Pensante

Ejemplos de Sílaba átona

Ejemplos, Idiomas y lenguaje - septiembre 30, 2017

Tal vez lo más conveniente, antes de abordar cada uno de los ejemplos que pueden existir en referencia a la Sílaba átona, sea dedicar un momento a la revisión de algunas definiciones, que serán útiles en la tarea de entender esta categoría gramatical dentro de su contexto preciso.

Imagen 1. Ejemplos de Sílaba átona

Definiciones fundamentales

En este sentido, puede que lo mejor sea comenzar con la propia definición de Sílaba, pues esto ayudará a tener presente la naturaleza de la partícula sobre la que se establece la definición de Sílaba átona, concepto que deberá ser igualmente traído a capítulo. A continuación, cada uno de estos conceptos.

Sílaba

Con respecto a la noción de sílaba, las distintas fuentes señalan que existen dos definiciones que deben tomarse en cuenta. Por un lado, se encuentra la explicación que da la Educación tradicional, la cual se inclina por concebir la sílaba como cada uno de los golpes de voz que emite el hablante, durante la pronunciación de una palabra. En otro ángulo, está entonces la explicación promulgada por la Lingüística, disciplina que además de dejar claro que para ella la definición tradicional resulta un poco obsoleta, indica que la sílaba será entendida entonces como una partícula fonética, compuesta por el conjunto de sonidos que pueden ser pronunciados por el hablante, en cada una de las emisiones de voz que ejecuta a la hora de articular una palabra. Así mismo, la Lingüística indica que, a nivel estructural, la sílaba es una unidad fonética, compuesta por un grupo de sonidos consonánticos que se agrupan en torno a una vocal, la cual se erige como la letra de mayor sonoridad, y el eje de la sílaba.

Sílaba átona

En otro orden de ideas, la mejor forma de explicar la Sílaba átona será recordando entonces cómo la sílaba está constituida por un grupo de consonantes, que se agrupan en torno a una vocal, por ser la letra con mayor intensidad sonora, al tiempo que la propia sílaba se une a otras semejantes para formar palabras, en donde una de todas las sílabas cuenta con mayor sonoridad que las otras, debido a la acentuación de esta partícula. En consecuencia, la Gramática opta por ver a esa sílaba acentuada –bien si el acento es prosódico u ortográfico- como la sílaba tónica, mientras que todas aquellas sílabas que hacen parte también de la palabra, pero que tienen una menor intensidad o tonalidad, debido a que no son el receptáculo del acento, serán conocidas como sílabas átonas. Así mismo, es importante destacar, que mientras una palabra cuenta con una sola Sílaba tónica, por el contrario tendrá varias sílabas átonas.

Ejemplos de sílabas átonas

Empero, existiendo acentos ortográficos y prosódicos, no se podrá hablar de un solo de caso de sílaba átona, o al menos de su identificación, por lo que a la hora de exponer algunos ejemplos sobre esta categoría gramatical, lo mejor será entonces distinguir entre cada uno de los casos, tal como se muestra a continuación:

Sílabas átonas en palabras con acento ortográfico

En el caso de palabras que cuenten en su ortografía con la presencia de tilde o acento será mucho más sencillo identificar las sílabas átonas de la palabra, pues bastará con saber que son aquellas que no cuentan precisamente con este elemento ortográfico, es decir, todas las sílabas que no están acentuadas, como puede verse en los ejemplos que se exponen seguidamente, y en donde aparecen subrayadas todas las sílabas átonas que puede tener una palabra:

Lá-grima; Mó-naco; Fran-cés; E-rrá-tico; Mé-xico; Cús-pide; Vol-cán; Ló-gica: Psi-co-lo-gía; Homo-gé-neo; Es-pá-tula; Drá-cula; Trigonome-tría; Ál-gebra; Gra-má-tica; Lin-güís-tica; Mi-cró-fono; Escor-pión; A-grí-cola; Cá-liz; Brú-jula; Orto-grá-fico; Sí-laba; Bár-bara; Có-digo; Te-lé-fono; Fan-tás-tico; Le-gí-timo; Có-lera; Pi-rá-mide.

Sílabas átonas en palabras con acento prosódico

Por su parte, las sílabas átonas de las palabras que no cuentan con acento ortográfico puede que sean un poco más difíciles de identificar, puesto que primero deberá reconocerse cuál es la sílaba tónica de la palabra, es decir, aquella en donde recae el acento prosódico, a fin de reconocer entonces cuáles son las sílabas con menor intensidad sonora.  A continuación, algunos ejemplos de sílabas átonas en palabras con acento prosódico (las sílabas subrayadas corresponden a las átonas, mientras aquella que no lo ha sido será la sílaba tónica):

Ce-bo-lla; E-xa-men; Choco-la-te; For-tu-na; Ca-mi-lo; To-ma-te; Pe-dal; Son-ri-sa; Pues-to; Bos-que; Ta-za; Len-tes; Lo-cu-ra; Gui-ta-rra; Ar-te; Ce-pi-llo; Co-ro-na; Re-tra-to; Fa-mi-lia; Lin-ter-na;
Pe-di-do; Repasa-dor; Nue-ve; Sig-no; Co-lum-pio; Gol-pe; Ni-ña; Ele-fan-te; Ro-ma-no.

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