Previo a aborda una exposición sobre los distintos ejemplos que pueden encontrarse en las oraciones sobre el Sujeto tácito, se revisarán algunas definiciones, que de seguro servirán para entender cada uno de estos casos, en su justo contexto lingüístico.
Definiciones fundamentales
Por consiguiente, también será necesario delimitar esta revisión teórica a tres nociones específica: la Oración, el Sujeto y el Sujeto tácito, por encontrarse directamente relacionado con los ejemplos, que se estudiarán posteriormente. A continuación, cada una de estas definiciones:
La oración
De esta manera, se comenzará por decir entonces que la Oración puede ser explicada como un conjunto de palabras, que se enlazan o disponen de forma coherente, para expresar significados completos. Por ende, se puede señalar también que la Palabra es el núcleo de la Oración.
Igualmente, la Oración ha sido descrita como la mínima estructura, con significado propio e independencia sintáctica, que puede encontrarse en el texto, y que cumple con la tarea de expresar significados.
Por otro lado, la Lingüística señala también que la Oración es una estructura sintáctica, conformada por dos distintas partes: Sujeto y Predicado.
El sujeto
En cuanto al concepto del Sujeto, la Lingüística ha señalado, a grandes rasgos, que este debe ser entendido como una de las dos partículas o estructuras sintácticas, que se encargan de componen la oración.
De forma mucho más precisa, el Sujeto será la parte de la oración que tiene como misión señalar la entidad o el ente que ejecuta o recibe la acción, que se encuentra señalada por el Predicado, en específico por el verbo que constituye su núcleo. En consecuencia, siempre que se quiera conocer el Sujeto, se deberá volver sobre el texto, y preguntarle a la oración ¿quién ejecuta o recibe la acción? La respuesta será el Sujeto.
Por otro lado, la Morfosintaxis señala que el Sujeto es una estructura lingüística, que se encuentra compuesta por el Sintagma nominal (SN), el cual cuenta a su vez con tres distintos elementos, cada uno de los cuales han sido explicados de la siguiente forma:
- Núcleo (N): por un lado, se encuentra el Núcleo del Sintagma nominal, el cual se encuentra conformado por los pronombres o los sustantivos, es decir, partículas lingüísticas, que cumplen con el papel de señalar las entidades que ejecutan acciones en la oración.
- Determinantes: así mismo, en el Sintagma nominal, existen los adjetivos, los cuales cumplen con la tarea de señalar atributos de la entidad, los cuales permiten determinarla, o dicho de otro modo, distinguirla de sus semejantes.
- Complemento del nombre: por último, en el Sintagma nominal también podrá hablarse de la presencia de complementos del nombre o adyacentes, los cuales cumplen la tarea de complementar al verbo.
Sujeto tácito
Por último, también será necesario lanzar luces sobre el concepto de Sujeto tácito, el cual ha sido explicado por las distintas fuentes como uno de los siete distintos tipos de sujetos, que pueden encontrarse en las oraciones.
De forma más exacta, el Sujeto tácito será aquel que no se encuentra expresado o nombrado de forma clara en la oración, sino que se debe inferir. Sin embargo, como sujeto al fin, el Sujeto tácito también se determina preguntándolo a la oración ¿quién ejecuta o recibe la oración? Esta clase de Sujeto es conocido también por otros nombres como Sujeto omitido, implícito o elíptico.
Ejemplos de sujetos tácitos
Toda vez se han revisado estas definiciones, puede que ciertamente sea más sencillo abordar la exposición de algunos de los tantos ejemplos, que se encuentran en torno al Sujeto tácito. A continuación, los siguientes casos:
Comí mucho → ¿quién comió mucho? Yo (sujeto tácito, no está nombrado en la oración)
Fuimos de compras → ¿quiénes fueron de compras? Nosotras (sujeto tácito, no está nombrado)
La recogió temprano → ¿quién la recogió? Él (sujeto tácito, no está nombrado)
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