Un Reino Perdido en Honduras
En las regiones montañosas de Honduras, oculta en la selva de Mosquitia, exploradores de National Geographic afirman haber encontrado la legendaria Ciudad Blanca, más popularmente conocida como la Ciudad Mono de Honduras.
La historia de la ciudad es bastante interesante. Habría sido construida hace más de un milenio para ser abandonada, por razones desconocidas, algunos siglos más adelante. Su primera referencia aparece en una carta que el conquistador Hernán Cortés envió al Rey de España en la que contaba del relato de los habitantes de Honduras sobre la existencia de una inmensa y riquísima ciudad en las selvas de la alta América Central.
Leyendas del origen de la ciudad
Que se sepa, ningún conquistador español arribó al legendario lugar, aunque quienes clamaban haberlo hecho, afirmaban que estaba lleno de tesoros, alentando la imaginación y la avaricia de sus compatriotas. Sin embargo, si existen referencias indígenas a la dicha ciudad de personas que habrían estado allí o que, al menos, la habrían visto. De acuerdo con estos relatos, la ciudad sería completamente blanca, adorando a un dios Mono y adornando sus callejones con gran cantidad de estatuas de animales. Si bien los indígenas también hablan de inmensas riquezas, esta es una figura común de cualquier ciudad desconocida, por lo que los antropólogos nunca habían prestado atención.
De acuerdo con los relatos españoles, en muchos poblados de las cercanías se contaba de los tiempos en que los monos gigantes, habitantes de la ciudad, bajaban a secuestrar mujeres para llevarlas a su ciudad. Estas mujeres luego darían a luz a engendros (mitad mono, mitad hombre), y para vengarlas los indígenas capturarían primates de las selvas y luego los matarían en un sacrificio ritual.
¿Habrá aparecido la ciudad del Dios Mono?
Esta es solo una de varias leyendas respecto a la legendaria ciudad. Tras los tiempos de la conquista, la siguiente referencia a la ciudad nos llega en 1940 cuando Theodore Moore, un explorador estadounidense, afirmó haber encontrado la ciudad. De acuerdo con el norteamericano, la ciudad sería tal y como se le describía (incluyendo los tesoros), y prefería mantener su ubicación en secreto hasta que pudiera organizar una expedición completa. Moore murió 12 años después sin jamás revelar la supuesta ubicación.
Sin embargo, oculta en lo más profundo de las selvas hondureñas, los exploradores del equipo de National Geographic liderado por Cristopher Fisher, de la Universidad Estatal de Colorado, habrían encontrado un centro monumental muy semejante al relatado por las historias. De acuerdo con Fisher, “entre los elementos hay una piedra ceremonial y algunos buques finamente tallados y decorados con figuras zoomórficas: buitres y serpientes”. El objeto más llamativo sería la escultura de la cabeza de un jaguar – humano, la cual, según Fischer, “podría representar un chamán o brujo transformado en espíritu”.
Al igual que Theodore Moore, los investigadores se rehúsan a revelar la ubicación exacta del sitio por temor a los posibles saqueos que sobrevendrían. Así, el mundo se encuentra a la espera de más información sobre la ciudad, sus anteriores habitantes y sus características más relevantes. De ser cierto el descubrimiento, sería uno de los grandes hitos del siglo XXI y una de las primeras ciudades en descubrirse en los últimos años.
Las leyendas indígenas, aunque se transforman con el tiempo, pueden tener una base de verdad: este es el caso con la enigmática Ciudad Blanca o Ciudad del Dios Mono. ¿Qué otras leyendas conoces que podrían tener una base real?
Fuente de imágenes: 1: mysteryplanet.com.ar; 2: abc.es; 3: cdn.latribuna.hn.