Misteriosos destellos en un cuerpo planetario
Desde hace varios años los telescopios alrededor del mundo comenzaron a revelar la presencia de un misterioso punto brillante en la superficie del planeta enano Ceres (que orbita en el cinturón de asteroides). La primera imagen, tomada por el Telescopio Espacial Hubble, mostraba ya en 2004 un punto brillante que aparecía en la superficie del planeta. En aquel entonces las fotografías de Hubble tenían una resolución muy baja (el satélite está pensado para fotografiar estrellas lejanas y no puede enfocar bien los planetas), pero ya comenzaba a orquestarse el misterio.
Nuevas imágenes revelaron la existencia efectiva de este punto: no se trataba, como muchos creían, de un error del telescopio o una coincidencia. Pero sin lugar a dudas el momento más importante ocurrió en febrero de este año cuando la sonda espacial Dawn de la NASA detectó un segundo punto brillante muy cercano al primero. A mediados de abril la sonda se acercó lo suficiente para obtener imágenes de alta resolución y mostrar que, en efecto, se trataba de dos puntos brillantes en la superficie del planeta enano. Varios puntos más pequeños también podían detallarse en la superficie.
¿Cómo explicar el misterio?
¿De qué podía tratarse? Los científicos pronto comenzaron a realizar una serie de hipótesis con miras a explicar el misterioso fenómeno. Algunos le apuntaban a lagos congelados que reflejaban la luz solar, otros, a criovolcanismo o géiseres helados. Una teoría que se popularizó por un breve tiempo hablaba de la existencia de una pequeña sociedad extraterrestre (quizás, un puesto de avanzada), algo que por un momento pareció verificar el descubrimiento de una pirámide en la superficie del planeta.
Sin embargo, ninguna de las hipótesis satisfizo a la comunidad científica, que al día de hoy sigue interesada en descubrir la causa de los misteriosos puntos brillantes de Ceres. Una nueva hipótesis, presentada durante la última Reunión Anual de Cartógrafos Geológicos Planetarios le apunta a la existencia de depósitos salinos que hervirían debido al gradiente geotérmico (al no tener atmósfera, el agua hierve a mucha menor temperatura en Ceres que en la Tierra). Sin embargo, nada está escrito y esta hipótesis podría sufrir el mismo destino que su predecesora – la de los lagos helados – que fue descartada en relativamente poco tiempo.
Por su parte, quienes creen en la existencia de civilizaciones no humanas en nuestro sistema solar afirman que se trata de la evidencia de una ciudadela o fortaleza extraterrestre. ¿Qué opinas? ¿Cómo explicarías los misteriosos puntos?
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