A los 15 días de nacer se empezó a transformar

Su nombre es Ramesh Darji. A los 11 años de edad, ya mostraba una apariencia de un anciano arrugado, con una piel gruesa, áspera y de cierto modo, curtida y cada vez más tiesa. Esto, debido a una extraño mal progresivo, denominado por la ciencia como ictosis arlequin, una patología degenerativa de la piel, que lo aqueja desde el momento de nacer y le está convirtiendo cada parte del cuerpo en piedra. Algo insólito dentro de muchos casos extraños.

Duró varios años lanzando una señal de ayuda, pues cuenta con muy escasos recursos. Entonces atrajo la solidaridad de una reconocida cantante de Inglaterra, quien ayudó a informar masivamente su historia.

De acuerdo con la versión de la madre de Ramesh, Nar Kumari, cuando era tan sólo un bebé recién nacido, parecía completamente normal. Pero cuando pasaron 15 días, se percataron de que al niño le habían aparecido unas raras escamas negras. Les parecía algo sobrenatural.

Por su parte, el padre del menor, Nanda, explicó que a los pocos días de haberle salido esas cosas negras, «dijo que le dolía el cuerpo y no caminó más. Nunca nos pudo explicar qué le pasaba. Sólo nos informaba si tenía hambre o quería ir al baño. Solía sentarse a llorar, pero nosotros no sabíamos qué ocurría ni cómo ayudarlo”, detalló.

Una rara patología genética que convierte a los niños en monstruos

La extraña enfermedad se ha denominado ictiosis arlequín, por lo que varias partes de la piel del cuerpo se van tornando gruesas y muy duras, como el arlequín de un bufón o a un traje blindado. Hay otros niños que nacen con esta anomalía, pero le ataca directamente a los párpados, mismos que al nacer salen volteados y totalmente rojos. Así mismo, ataca otras partes como el tórax.

El mal se produce a causa de que el proceso natural de queratinización del cuerpo se altera. El tratamiento consta de varias fases muy dolorosas, acompañado de fuertes antibióticos y jabones especializados. Uno de los síntomas de la ictosis arlequín es que la piel puede crecer aceleradamente, cerca de 7 de veces más de lo natural.

Aquella cantante inglesa que se apiadó de él, fue Joss Stone, quien de manera filantrópica,  dedicó un concierto en la ciudad de Katmandú, Nepal, con el fin de obtener los recursos necesarios para el costoso tratamiento del menor. En aquella oportunidad, se recaudaron más de US $2000.

De tal modo que con ese dinero obtenido por la solidaridad de la artista del pop, el pequeño Ramesh recibió el tratamiento adecuado en el “Hospital Clínico de Katmandu”, donde le practicaron varias cirugías para retirarle esa gruesa capa de negras escamas.

Finalmente, el niño pudo recuperar su motricidad y los médicos le auguraron una recuperación progresiva y eficaz. Pero sin la ayuda de la filantrópica cantante, no hubiera podido surgir.

Imagen: unotv.com