En el ámbito de la Literatura contemporánea, se conoce con el nombre de Ensayo sobre la Ceguera a una novela, nacida de la pluma del célebre escritor portugués y Nobel de Literatura, José Saramago, quien la publicó por primera vez en el año 1995, siendo editada en Español por primera vez al año siguiente, gracias al trabajo de la casa editorial Alfaguara.
Particularidades literarias
Esta novela de Saramago constituye otro testimonio material de la capacidad de este escritor para desafiar las normas ortográficas y literarias, concebidas hasta el momento, demostrando que un autor, que maneje a perfección la lengua puede hacer una obra magistral sin la necesidad de escribir por ejemplo una sola coma en el desarrollo del texto. En este sentido, por ejemplo, Saramago construye una larga novela, llena de personajes, a los cuales sin embargo no asigna nombres específicos, sino que se vale de una descripción exhaustiva, lo suficientemente bien elaborada, que cada lector conocerá a profundidad a cada uno de los personajes, sin necesidad de nombrarlos. Un hecho inédito en la Literatura universal, y que deja en evidencia una vez más el gran talento de este escritor.
Descripción de la novela
Con respecto a la naturaleza y el argumento de esta novela, Ensayo sobre la Ceguera puede ser definida, según coinciden la mayoría de críticos, como una novela psicológica, contada en primera persona por un narrador omnisciente, cuya voz se encuentra encarnada en el personaje de la esposa del médico, quien a su vez se erige como protagonistas, siendo la perspectiva a través de la cual se van contando cada uno de los crudos eventos que tienen lugar en la novela.
En cuanto a su argumento, esta novela comienza planteando el advenimiento de una epidemia que comienza a atacar a una ciudad: la ceguera blanca, la cual está constituida por una afección, que sin previo aviso, deja a la persona totalmente ciega, inundando su visión con una niebla blanca, que le roba el sentido de la vista. De esta forma, muchos son los que acuden desesperados al oftalmólogo, quien después de algunos contactos queda también totalmente ciego. Ante el avance de la enfermedad, el gobierno y la misma sociedad temerosa decide que debe aislárseles a aquellos que se encuentran contaminados, diseñándose en tiempo récord una especie de campo de concentración a donde serán enviados aquellos enfermos de ceguera. Sin embargo, la esposa del médico, quien parece ser inmune a esta enfermedad, en pro de que su familia no sea desmembrada, finge estar ciega para ir con ellos al sitio donde serán llevados.
Al llegar al campo de aislamiento, la mujer se convierte en un importante líder para aquellos recién llegados, sirviéndoles de guía durante los primeros momentos. Con el tiempo, la ayuda deja de llegar desde afuera, puesto que la enfermedad en realidad no ha sido aislada, contaminándose también la sociedad que se encuentra afuera, quien termina destruyéndose. Por su parte, dentro del asilo se crea un micro mundo, de jerarquías que comienza a rebelar el verdadero carácter del humano, antes la desgracia.
Así mismo, en algún momento llega un dictador, también ciego, que comienza a someter a los otros enfermos, degradándolos y usándolos de las formas más viles, dominando y manipulándolos a través de la comida y demás necesidades. Sin embargo, con el tiempo los débiles también se rebelan, logrando vencer al opresor, e incluso saliendo del presidio, y encontrándose con una sociedad destruida. Ya en casa del médico, cuando los seis personajes protagónicos se han convertido en una especie de manada, la vista regresa, para revelarles también que a veces es mucho más cómodo tener intimidad con otro ser cuando la vista no se interpone.
Interpretación
En cuanto al mensaje que puede contener esta novela, algunos analistas y críticos literarios han llegado a señalar cómo Saramago pone en escena los escenarios apocalípticos más trágicos, a fin de forzar a sus personajes a comportarse desde el instinto de la supervivencia, revelando así una gama de emociones primarias, inherentes al hombre y que pueden surgir ante el peligro de muerte. Así mismo expone el miedo de la sociedad a lo desconocido, y el cómo este grupo humano puede organizarse para defenderse de aquello que siente como amenaza, aun cuando esto incluya aislar o eliminar a algunos de sus miembros.
Otro de los arquetipos que parece querer abordar Saramago en Ensayo sobre la Ceguera es el del paria, aquel individuo que es despreciado a causa de una condición específica. En este caso particular por una enfermedad, lo cual se convierte en otro gran tema dentro de esta obra narrativa, en donde su autor tal vez quiere colocar en escena cómo un padecimiento marca para siempre al humano, el cual además puede llegar a ser etiquetado, marginado e incluso aislado, sin que importe su humanidad, pues de la noche a la mañana él mismo se ha convertido en una amenaza para ella. Igualmente, puede ser una alegoría también al instinto de supervivencia, demostrando cómo ante cualquier circunstancia la humanidad siempre encontrará manera de seguir adelante, de sobrevivir.
Imagen: pintura «La parábola de los ciegos» (Brueghel el Viejo, 1568) / fuente: wikipedia.org