Así mismo, cada sociedad o comunidad específica –sea esta política, institucional, religiosa o simplemente gregaria- tiene unos valores determinados, los cuales difieren en ocasiones entre sí, pues los valores no son los mismos para todos los grupos humanos establecidos en el mundo. Por ejemplo el respeto a los padres es un valor que no es entendido de la misma forma en occidente que en oriente. Otro ejemplo resaltante en este sentido es por ejemplo el valor que ha tomado el respeto a la mujer contrastando con la noción que se tiene de este mismo valor en algunos países del Medio Oriente.

De esta manera, según la naturaleza del colectivo y sus valores, estos se dividen en valores morales, sociales, económicos, espirituales, familiares, cívicos, culturales y religiosos, que varían según la práctica de cada grupo. A pesar de que no existe una jerarquía de valores, ya que se les considera a todos igual de importantes y recíprocos, la sociedad sí ha llegado a identificarlos cómo cualidades positivas y necesarias para enriquecer las relaciones sociales, procurar la dignidad de cada miembro y mantener la armonía de ese colectivo. Por otro lado, también existen los antivalores, aquellas prácticas que sirven de menoscabo y deterioro de un colectivo específico.

Valores Morales

Tal vez, cuando el común denominador usa la palabra “valor” esté invocando a los “valores morales”, es decir, aquellas cualidades que una sociedad ve como eslabones de una cadena de perfeccionamiento de cada individuo, al tiempo que consideran que éste puede llevar al hombre o a la mujer a conservar su dignidad, procurando también la armonía y bienestar de todos los miembros de este colectivo humano.

No obstante, a pesar de que cada sociedad tiene en su cosmogonía una constelación de valores, cada individuo cuenta con la libertad y autonomía de escoger cuáles serán los valores morales más importantes que escogerá para guiar por ellos su vida. En este sentido, algunos autores reparan en que a pesar de que la escogencia de algunos valores determinados en un acto libre,  el acto de elegir unos sobre otros y ponerlos en práctica traerá consecuencias determinadas en el individuo, tanto en su vida como en el modo en que es percibido por los otros miembros de una sociedad.

Así mismo, cada sociedad presenta valores distintos, los cuales son moldeados de acuerdo a sus propias tradiciones, cultura, historia, religión y relaciones interpersonales. Sin embargo, se puede establecer una lista de valores morales, a pesar de que estos sean entendidos y practicados de maneras distintas por cada grupo humano establecido a lo largo del planeta. Entre los valores morales más comunes destacan: el Amor, al Respeto, el Agradecimiento, la Amistad, la Bondad, la Dignidad, la Humildad, la Libertad, la Generosidad, la Honestidad, la Laboriosidad, la Paz, la Justicia, la Lealtad, la Perseverancia, la Responsabilidad, la Prudencia, la Solidaridad y la Tolerancia.

Valores Religiosos

De igual manera, otro tipo de valor bastante reconocido y practicado son aquellos transmitidos por las religiones, los cuales -a diferencia de los morales- no dependen de una escogencia personal ni son una percepción colectiva, sino que responden a doctrinas y reglas, reseñadas en cada uno de los máximos libros religiosos, siendo enseñados de generación en generación por cada una de las religiones alrededor del mundo, las cuales pretenden que sean practicados y asumidos por cada uno de sus miembros de forma indistinta.

Al igual que con los valores morales, los valores religiosos difieren de una religión a otra, a pesar de que también apunten hacia cualidades humanas, que buscan la perfección del hombre, y por ende del mundo. Entre ellos destacan los siguientes: el Amor (a Dios y al Prójimo),  la Caridad, la Santidad, el Misericordia, el Respeto (A Dios, al Prójimo, a las pertenencias ajenas, al propio cuerpo), la Obediencia, la Sinceridad, la Honestidad, la Responsabilidad. 

Valores Culturales

Por su parte, los valores culturales constituyen una serie de creencias y actividades, que marcan las formas de expresión y relación entre los miembros de una sociedad. De esta forma los valores morales y religiosos están más ligados con las normas, mientras que los culturales tienen que ver con las tradiciones o costumbres de usa sociedad en particular, es decir con su comida, sus rituales, bailes, cantos, creencias, comidas, expresiones artísticas, símbolos e incluso su Lengua.

No obstante, a pesar de ser un poco más abstractos, al igual que los otros tipos de valores, es un valor constituido en el momento en que un grupo de individuos lo considera y lo practica como tal, difiriendo igualmente de cultura en cultura. Así mismo, este tipo de valor es ensañado directamente por la familia, y en ocasiones pueden que existan valores que vayan o choquen con aquellos enseñados por la sociedad o la religión, dependiendo entonces de cada individuo cuál practicará o cuál tomará como guía.

Otros tipos de valores

Finalmente, existen otros tipos de valores, como por ejemplo los Valores Estéticos, conformados por los juicios de valor que una sociedad determinada tiene sobre la apariencia de un objeto específico, así como hacia la apariencia de los individuos. Así mismo, se encuentran los Valores Familiares, que son aquellos inculcados en la casa materna, como parte de la Educación en miras de formar individuos adaptados socialmente, al igual que los valores culturales, estos se transmiten de generación en generación. En tercer lugar, se encuentran los Valores Empresariales, concepto un poco más corporativo, conformado por los modos, estrategias y objetivos de cada empresa, a la cual deben responder sus empleados y socios.

Fuente de imagen: cuentosinfantilescortos.net