Es probable que, previo a abordar algunas de las célebres frases que han pronunciado algunos de los más notables escritores y pensadores, sobre el arrepentimiento, se necesario revisar la propia definición de este sentimiento humano.
¿Qué es el arrepentimiento?
Más allá de sus interpretaciones religiosas o psicológicas, básicamente, el Arrepentimiento es un sentimiento humano, que puede ser explicado como la tristeza o pesar que un individuo siente sobre su manera pasada de pensar o comportarse, bien si ese sentimiento es hacia toda una etapa de la vida, o algún aspecto en particular. En consecuencia, el Arrepentimiento también puede ser visto como el cambio de opinión o parecer que una persona experimenta hacia alguno de sus actos u opiniones: Paola se arrepintió de haber peleado con su hermana Diana.
De acuerdo a lo que indican algunas fuentes, la palabra en español “Arrepentimiento” parece evolucionar –etimológicamente hablando- del vocablo en francés repentir, el cual a su vez deriva del latín poenitere, palabra que puede ser traducida al español como “penitente”, por lo cual dentro de la palabra Arrepentimiento se encuentra también el concepto de pena, de tristeza y pesar, el cual quizás surge no sólo por el dolor de haber actuado de alguna manera específica, sino de la total imposibilidad de cambiar el pasado.
Así mismo, pero ya entrando un poco en terrenos religiosos, algunas doctrinas como el Cristianismo ven en el Arrepentimiento la idea de cambio de opinión que provoca que el individuo se aleje del error, y se acerque al comportar correcto, por lo que entonces –según algunas creencias- el Arrepentimiento sería la oportunidad de la persona, de cambiar de opinión sobres sus actos y vida- y aplicar cambios que le permitan acercarse a lo que estas corrientes de pensamiento consideran el buen actuar.
Frases sobre el Arrepentimiento
Sin embargo, más allá de la idea que se tenga sobre el Arrepentimiento, casi cualquier persona ha experimentado este pesar o cambio de opinión sobre algún acto o decisión, bien si este sentimiento surgió de inmediato, o con el pasar de los años. De ahí que esta emoción humana ha sido tema abordado por algunos de los más grandes pensadores y artistas de la Humanidad, a lo largo de la Historia, en su camino por dilucidar los subterfugios, raíces y potencialidades de este sentimiento. En este sentido, quizás sería necesario hacer una breve revisión de algunas de las más importantes frases sobre el Arrepentimiento. A continuación, algunas de ellas:
Giovanni Boccaccio (1313-1375) “Vale más actuar exponiéndose a arrepentirse de ello, que arrepentirse de no haber hecho nada”.
“Vale más actuar exponiéndose a arrepentirse de ello, que arrepentirse de no haber hecho nada”.
Una de ellas es esta frase de Giovanni Boccaccio, escritor italiano de la Edad Media, quien sin tanta connotación religiosa, veía al Arrepentimiento como un sentimiento al cual no debía usarse como excusa para no actuar, pues según su idea era preferible siempre arrepentirse de lo que se hacía, que de haber perdido la oportunidad de hacerlo. Por consiguiente, Boccaccio invitaba siempre al atreverse, y a la opción de ver el Arrepentimiento con menos sentido trágico, y más como una consecuencia de la valentía.
Miguel de Cervantes (1547 – 1616) Un buen arrepentimiento es la mejor medicina que tienen las enfermedades del alma.
Un buen arrepentimiento es la mejor medicina que tienen las enfermedades del alma.
Por su parte, un poco más espiritual, Miguel de Cervantes colocaba el acento en otro aspecto del Arrepentimiento: su capacidad sanadora. Por ende, para el autor de Don Quijote de la Mancha, a la larga el alma humana podría enfermar, a raíz de ciertos sentimientos, que encontrarían dificultad para salir de ella, como por ejemplo la culpa. No obstante, al Arrepentirse, el hombre aun cuando siente pena, de alguna forma logra saldar cuentas con su espíritu y su historia, por lo que más allá del dolor que puede implicar arrepentirse, hacerlo puede tener un efecto purificador y sanador, haciendo que el individuo ponga punto final a un malestar, dando paso entonces hacia el avance.
Baruch Spinoza (1632 – 1677) “No me arrepiento de nada. El que se arrepiente de lo que ha hecho es doblemente miserable”.
“No me arrepiento de nada. El que se arrepiente de lo que ha hecho es doblemente miserable”.
En sentido contrario, Baruch Spinoza, filósofo europeo planteaba que por el contrario de lo que planteaban algunas corrientes, tanto filosóficas como religiosas, en realidad no había que arrepentirse de nada, puesto que esto conducía al hombre a sentir incluso más dolor que el que le ocasionaba la culpa del acto cometido. En consecuencia, una buena forma de alejarse del sufrimiento y de la miseria –según este filósofo- era evitar sentir arrepentimiento, pues era un sentimiento que simplemente conducía a un sufrimiento doble, tal vez porque por más que doliera lo que se había hecho, el tiempo no podía dar marcha atrás.
Charles Dickens (1812-1870) Nunca es tarde para el arrepentimiento y la reparación.
Nunca es tarde para el arrepentimiento y la reparación.
No obstante, no siempre el Arrepentimiento es visto como la acción de dolerse por algo que se ha hecho, o dejado de hacer, sino que para otros, como por ejemplo el escritor británico Charles Dickens, este también implica la necesidad de reparar de algún modo el daño hecho. De esta forma, el Arrepentimiento verdadero –o al menos positivo- no sólo buscaría el sentimiento de pena, sino el impulso por cambiar o corregir aquello que se ha hecho, situación que de cumplirse cerraría verdaderamente el ciclo, teniendo entonces la oportunidad de avanzar, al tiempo que se toma conciencia poco a poco sobre la importancia de pensar antes de actuar.
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