Misterio en los cielos chilenos
El 3 de septiembre de 2012, en inmediaciones de la Academia de Guerra Aérea (o Academia de Guerra de la Fuerza Aérea) de Santiago de Chile, varias personas declararon haber visto una serie de luces elevarse en el cielo. El fenómeno quedó grabado en algunas de las cámaras del complejo, por lo que los militares chilenos tuvieron acceso a un video del suceso. El gobierno, interesado en desvelar el asunto, organizó una comisión para su estudio.
El suceso ocurrió a las 7:45 de la noche, los testigos fueron un paramédico, un técnico en emergencias y un sargento. El sargento era responsable por la seguridad de la Academia y se encontraba ayudando a los otros testigos a llenar el tanque de su ambulancia cuando todos presenciaron un grupo de 5 luces que flotaban sobre la cercana cordillera de los Andes. El sargento inicialmente pensó que se trataba de helicópteros (pues se estaban moviendo en dirección a la Academia), pero tras darse cuenta de que no generaban ningún sonido salió corriendo hacia los soldados en guardia, mientras sus dos compañeros sacaban sus celulares para filmar el fenómeno.
De acuerdo con los testimonios, las luces se movieron en formación, como una línea recta; más adelante se movieron para formar un triángulo y, por último, un círculo, antes de desaparecer tras las montañas. El sargento inmediatamente informó a su superior (que llegó a la Academia unos minutos después), quién se comunicó con la Comisión para el Estudio de Fenómenos Aéreos Anómalos (CEFAA), cuyo director, a su vez, arribó 15 minutos después al lugar de los hechos.
Ambos declaran haber visto al sargento sumamente excitado respecto a lo que acababa de suceder, así como a los dos miembros del personal médico. El sargento declaró que jamás había creído en dichos eventos hasta lo que vio ese día. La CEFAA entonces puso manos a la obra, revisó los videos y los puso a disposición del Departamento Chileno de Policía, quien logró aislar en los videos los momentos en los que las luces eran visibles en formación. Aunque el sargento afirmó que las luces tenían un color rojizo, en el video se ven de color blanco o amarillo.
El misterio parece no tener respuesta
Tras 3 años de investigación involucrando meteorólogos, psicólogos y expertos en radares, entre otro personal capacitado, la CEFAA concluyó que el avistamiento se trató de un “fenómeno lumínico anómalo de origen desconocido”. Pese a ser reacia al uso del término “ovni”, no cabe duda de que el fenómeno no pudo ser explicado de manera lógica.
Este tipo de sucesos son comunes en los cielos chilenos, y los militares han afirmado que sus pilotos suelen avistar objetos no identificados en los vuelos de reconocimiento y de rutina que realizan en su día a día. Así mismo, miembros de la CEFAA declararon conocer fenómenos no explicados en los cielos chilenos y seguir trabajando en su explicación. Los miembros de esta comisión también solicitaron el apoyo de países vecinos en las investigaciones de estos fenómenos incomprensibles. El video captado por el paramédico pueden verlo aquí.
¿Hay algún lector chileno que nos pueda contar un poco más de estos avistamientos? Y los lectores de otros países, ¿conocen casos semejantes? ¿Hay instituciones en sus países que se tomen en serio el estudio de estos fenómenos?
Fuente de imágenes: 1: planeta5000.com; 2: lanacion.cl.