El Pensante

Interfijos diferenciales

Idiomas y lenguaje - julio 23, 2018

Antes de abordar una definición sobre los Interfijos diferenciales, puede que lo más conveniente, sea revisar de forma breve algunas definiciones, que de seguro permitirán entender de forma un poco más contextualizada este subtipo de partícula morfológica.

Imagen 1. Interfijos diferenciales

Definiciones fundamentales

De esta manera, puede que resulte también conveniente delimitar esta revisión teórica a cinco nociones específicas: la primera de ellas, el concepto mismo de Morfología, a fin de cobrar conciencia sobre el tipo de disciplina en la cual ha surgido la noción de Interfijos diferenciales. Por otro lado, también será necesario revisar las definiciones de Monemas, Morfemas, Morfemas dependientes derivativos e Interfijos. A continuación, cada una de estas definiciones:

Morfología

En consecuencia, se comenzará por decir que la Morfología ha sido explicada por los distintos autores como una de las principales disciplinas de la Lingüística, así también como la materia que se encarga de estudiar la estructura interna de las palabras, tanto en cuanto a las unidades indivisibles que las conforman, como en relación con las distintas clases de palabras, que resultan de la combinación de estas distintas partículas.

Monemas

Por otra parte, dentro de las distintas unidades que conforman la estructura interna de la palabra se encuentran los Monemas, los cuales entonces serán considerados como aquellas unidades, indivisibles y portadores de diferentes información, bien sea léxica, gramatical o morfológica, cuya combinación produce nuevas palabras. De esta manera, los Monemas podrán considerarse también como parte de aquella Primera articulación, descrita por el lingüista francés André Martinet, al promulgar su teoría sobre la Doble articulación del Lenguaje.

Morfemas

Así mismo, será menester lanzar luces sobre el concepto de Morfemas, los cuales han sido explicados por las distintas fuentes lingüísticas como uno de los dos tipos de Monemas que existen en las lenguas naturales. Por lo tanto, los Morfemas se inscribirán dentro de la Primera articulación del Lenguaje, planteada por Martinet.

Igualmente, de forma un poco más específica, la Lingüística señala que los Morfemas pueden ser descritos como aquellas partículas, que aportan al lexema cierta información, bien sea de tipo gramatical o fonológica, complementándolo.

Morfemas dependientes derivativos

Al igual que los Monemas tienen dos distintos tipos de partículas: los Lexemas y los Morfemas, estos últimos también contarán con dos distintas subclases, las cuales se diferenciarán entre sí de acuerdo a la información que aportan a la estructura de la palabra; los Morfemas, que son las unidades de sentido gramatical de la palabra también podrán dividirse en dos distintas clases, las cuales podrán clasificar según su relación con el lexema.

De esta forma, existirán los Morfemas independientes, los cuales contarán con la capacidad de funcionar como una palabra autónoma, mientras que también existirán aquellos, denominados Morfemas dependientes, los cuales no podrán hacer vida si no es unidos al lexema, al cual se anexan para complementarlo, agregando información gramatical.

Así también, los Morfemas dependientes derivativos se clasificarán en derivativos y flexivos, siendo su diferencia más importante el proceso morfológico que desarrollan con el lexema al cual deben unirse. Por consiguiente, los Morfemas dependientes derivativos serán aquellos que deben unirse obligatoriamente al lexema, para crear con ellos nuevas palabras, las cuales se producirán siempre por medio de la Derivación, al tiempo que gozarán de plena independencia semántica, respecto a las partículas que han participado de su producción. Entre los diferentes tipos de Morfemas dependientes derivativos se encuentran los Sufijos, Prefijos e Interfijos.

Los Interfijos

Por último, la Lingüística también señalará como Interfijos a aquellas partículas, que pueden ser identificadas como uno de los diferentes tipos de Morfemas dependientes derivativos que existen en las Lenguas naturales, es decir, que serán entendidas, de forma general, como un tipo de partícula o monema, que constituye parte de la estructura interna de la palabra, por ende, se insertan en la Primera articulación de la palabra.

De la misma forma, la Morfología ha optado por definir los Interfijos como aquellos tipos de morfemas, necesariamente átonos, que se insertan en la palabra, entre el lexema y el sufijo, sirviendo a un tiempo de nexo, y por otro, agregando a la partícula información fonológica. En consecuencia, los Interfijos se diferenciarán también de los otros tipos de Morfemas dependientes derivativos (los prefijos y sufijos) que se anexan para agregar información gramatical.

Interfijos diferenciales

Una vez se han revisado cada una de estas diferentes definiciones, puede que ciertamente sea mucho más sencillo abordar una explicación sobre los Interfijos diferenciales, los cuales en primera instancia podrán ser concebidos como uno de los dos distintos tipos de Interfijos que existen en las Lenguas naturales, es decir que es un subtipo de Morfema dependiente derivativo, comprendido a la vez dentro de los Morfemas, y más generalmente, dentro de los Monemas.

En un sentido mucho más preciso, los Interfijos diferenciales serán entendidos como aquellos morfemas átonos y poseedores de información fonológica, que se insertan en la palabra, entre el lexema y el sufijo, a fin de crear con estas partículas una palabra diferente, a fin de que no se confunda con otra partícula, que podría constituir su forma homónima. Un ejemplo de este tipo de Interfijo será el siguiente:

En la palabra “carnicero” se podrá encontrar el Interfijo “ic” (carn-ic-ero) la cual se insertará en la forma “carnero”, la cual bien podría usarse como sustantivo para referirse al comerciante de carne, pero con la que se construye la forma diferenciada “carnicero” a fin de diferenciarla de la forma “carnero” con la que se nombra al animal mamífero.

Imagen: pixabay.com