El Pensante

La Batalla de Taxel, o cuando la caballería francesa venció a la flota holandesa

Historia - noviembre 4, 2016

Imagen 1. La Batalla de Taxel, o cuando la caballería francesa venció a la flota holandesa

Batallas

La Guerra es una de las características más recurrentes en todas las civilizaciones. Excepto por lo que pudo ser la utopía pacífica de la Creta Minoica (de la que hablamos en el artículo “¿Es posible la Paz?”) en general allí donde tenemos evidencia suficiente de una sociedad aparece la Guerra.

Pero a lo largo de la Historia, la Guerra se ha ido modificando. Seguramente una de las revoluciones más interesantes en este aspecto fue la aparición de las batallas marítimas y el desarrollo de gigantescos barcos capaces de funcionar como potentes máquinas de Guerra. En los primeros tiempos, estas batallas eran verdaderas “batallas terrestres” sobre el agua (pues los barcos chocaban y los soldados combatían en formación sobre ellos, buscando lanzar sus enemigos al mar), pero con el tiempo los barcos adquirieron armas a distancia capaces de destruir las naves enemigas sin chocar con ellas. Con el tiempo, dichas armas se volvieron más y más precisas y poderosas.

Y a medida que su poder aumentaba, se hacía más y más diferente a la guerra terrestre. Por esta razón, que una flota holandesa fuese capturada por un cuerpo francés de caballería en 1795 es algo bastante llamativo.

La Batalla de Texel

Conocida también como la Captura de la Flota Holandesa en Den Helder (pues muchos argumentan que no se trató de una batalla), la Batalla de Texel fue la única ocasión en la Historia en la que una fuerza de caballería ha capturado una flota enemiga.

Estaba entonces en curso la Guerra de la Primera Coalición, que enfrentaba a la recién creada República de Francia con, bueno, con prácticamente el resto de Europa. Holanda había sido atacada por el ejército francés y Ámsterdam había caído bajo dominio de los revolucionarios, que estaban ahora interesados en asegurar las costas.

Llegaron entonces reportes al ejército francés de que una flota importante se encontraba anclada en Den Helder, a unos 80 kilómetros de Ámsterdam. El General de Brigada Jean Guillaume de Winter quedó a cargo de dirigir la operación y arribó al lugar en la noche del 23 de enero de 1795.

De Winter había tenido la precaución de ordenar que cada húsar llevara en la grupa un soldado de infantería y de poner una tela en los cascos de cada animal. En la madrugada, mientras los hombres de la flota dormían, el general desplegó su ejército.

Aquel día no se disparó un solo tiro. Los caballos pudieron cruzar el hielo sin quebrarlo y los 14 barcos de guerra holandeses se rindieron ante los franceses. La cifra puede parecer pequeña, pero para el periodo se trataba de una flota muy poderosa (para hacerse a una idea, en Trafalgar, la batalla decisiva en las guerras napoleónicas, combatieron un total de 60 navíos, 27 británicos y 33 franco españoles). Al final, la República de Batavia se vio obligada a pagar 100 millones de florines para recuperar la flota.

Imagen: wikipedia.org