Entre las cosas que hemos aprendido es que no somos más que un punto, una minúscula mota en medio de un gigantesco sistema solar que, a su vez, es otra minúscula mota en medio de una gigantesca galaxia. Y esta última, claro, es sólo una de miles de millones que se esparcen a lo largo y ancho del Universo.

Estas galaxias presentan gran variedad en tamaño, forma y características. Aunque aún no se comprende a profundidad su formación – sólo se sabe que se componen de grandes cantidades de gas estelar – el análisis de sus diferencias ha brindado muchísima información y ha mostrado lo que podría, eventualmente, suceder con nuestra propia galaxia.

Pero algunos ejemplos son desde todo punto de vista dramáticos. Es el caso de W2246-0526, la galaxia más brillante del Universo conocido que parece estar ad portas de su completa y absoluta destrucción.

W2246-0526

Bautizada sencillamente con este nombre, la Galaxia estaría compuesta por cantidades impresionantes de gas que habrían construido en su centro un lugar verdaderamente caótico. Quizás, afirman, se trata de un gigantesco agujero negro en su interior – algo que parecen indicar las altísimas cantidades de radiación infrarroja que salen de la galaxia – pero también podría tratarse de otra cosa que no comprendemos del todo. Un gigantesco disco ubicado en torno al centro de la galaxia produce la misma luz que 300 billones de soles (billones en español, es decir, millones de millones).

Tal cantidad de luz indica que la galaxia está agotando rápidamente su reserva de gas y que se apagará tarde o temprano, como una llama que ardió con demasiada intensidad. Sin embargo, teniendo en cuenta que la Galaxia está ubicada a 12.400 millones de años luz lo más probable es que se haya apagado y que estemos viendo sus últimos momentos, de cuando el Universo era aún joven.

Quedan por analizar las razones de tal comportamiento. Hasta ahora, W2246-0526 es la única galaxia conocida en tener en su interior tal despliegue de energía.

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