Por aquella época el hijo del escritor británico Alan Alexander Mine visitaba el zoológico donde vivía el animal y llegó a encariñarse tanto con él que lo adaptó para sus cuentos, mismos que algunos califican de corte filosófico más que de tinte infantil. El bosque en el que vivía para aquel entonces se convirtió en el bosque de los cien Acres donde Winnie vivía en una casa construida al interior de un árbol y al que acompañan en sus aventuras otros animales como como Tigger, Puerquito, Búho, Conejo, Topo y otros más.

Walt Disney compra los derechos

Con el tiempo, Walt Disney terminó comprando los derechos del personaje y fue así como el oso más simpático del bosque de los cien acres alcanzó fama mundial. En 1966 se realizó la primera película: Winnie Pooh y el árbol de la miel, misma a la que sucederían muchas más alcanzando en el año 2000 una taquilla de 45 millones de dólares con la Película de Tigger, uno de los famosos personajes de los cuentos.

Una revelación importante

A finales de 2015 se hizo un anuncio importante en el que, contrario a lo que siempre se había pensado, Winnie no era un oso, ni tampoco era de origen británico, sino que realmente se trataba de una osa a la que un cazador le había matado a su madre y a la que había rescatado el teniente y posterior coronel canadiense Harry Colebourn comprándolo por 20 dólares de la época.