Historia de la Virgen de Fátima
Uno de los milagros más conocidos del siglo pasado fue la aparición de la Virgen María ante tres niños en la localidad portuguesa de Fátima el 13 de mayo de 1917. Los pequeños se encontraban apacentando sus ovejas cuando la mayor de ellos, Lucía dos Santos, sugirió a Jacinta y Francisco Marto que deberían regresar a sus hogares ante la inminente tormenta que parecía cernirse sobre el campo.
Mientras se encontraban caminando a sus hogares, vieron sobre una encina a una mujer “más brillante que el sol” que les dijo – entre otras – que venía del cielo y que para volver a verla debían regresar a ese lugar exactamente un mes después. La mujer (que, aunque nunca lo dijera, los pequeños ya sabían que era la Virgen), cumplió su promesa y siguió apareciendo el 13 de cada mes para hablarles, cita que los niños cumplieron excepto por el mes de Agosto, cuando fueron encarcelados por el administrador de la Vila Nova de Ourem.
De acuerdo con los pequeños, la mujer les habría dado 3 secretos y les habría prometido que en octubre haría un milagro que hiciera que las demás personas les creyeran. Pese a que las apariciones fueron ganando fama, la Virgen no era visible ante ninguno de los hombres y mujeres que acompañaban a los 3 niños: solo ellos podían verla, majestuosa, sobre la encina y escuchar sus mensajes.
La multitud llega a ver el Milagro
Así las cosas, el 13 de octubre una gran multitud se reunió en el lugar que los niños habían señalado. Lo que siguió es uno de los fenómenos inexplicables más maravillosos y mejor documentados de la historia moderna: una multitud de alrededor de 70 mil personas, atentas a las palabras de los niños, levantaron los ojos hacia el sol cuando Lucía así lo ordenó y fueron testigos del movimiento del astro rey y de cambios de color en su superficie. Muchos describieron el evento “como si el sol danzara en los cielos”.
Hasta el momento, no existe ninguna explicación razonable para el suceso. Los observatorios astronómicos no detectaron ninguna alteración en los movimientos del Astro y, por obvias razones, de haberse movido realmente el sol las consecuencias en la tierra habrían sido catastróficas. Así mismo, la hipótesis de la ilusión óptica (algo común tras ver el sol directamente) han sido cuestionadas por quienes afirman que las personas no miraron el astro hasta que Lucía así lo ordenó, por lo que no tiene sentido que fueran afectados por este tipo de ilusión.
Los tres secretos de la Virgen
El milagro se realizó como preludio para los 3 secretos de la Virgen que serían revelados por los pequeños. Pese a que los dos primeros secretos se publicaron aquel mismo año, el tercero hubo de esperar hasta el 2000 cuando se hizo público por parte de la Iglesia. El primer misterio hablaba de la horrible condena de los pecadores, el segundo, predijo acertadamente el estallido de la Segunda Guerra Mundial durante el papado de Pío XI (en realidad la Guerra se declaró en septiembre de 1939, y Pío XI murió en febrero, pero muchos consideran que con las primeras agresiones a Checoslovaquia en 1938 la confrontación se hizo inevitable). El tercero, publicado de manera oficial por la Iglesia, está un tanto abierto a la interpretación, pero parece hablar del fin del mundo… o del fin de la fe cristiana. A continuación lo copio en su totalidad:
Después de las dos partes que ya he expuesto, hemos visto al lado izquierdo de Nuestra Señora un poco más en lo alto a un Ángel con una espada de fuego en la mano izquierda; centelleando emitía llamas que parecía iban a incendiar el mundo; pero se apagaban al contacto con el esplendor que Nuestra Señora irradiaba con su mano derecha dirigida hacia él; el Ángel señalando la tierra con su mano derecha, dijo con fuerte voz: ¡Penitencia, Penitencia, Penitencia! Y vimos en una inmensa luz qué es Dios: « algo semejante a como se ven las personas en un espejo cuando pasan ante él» a un Obispo vestido de Blanco « hemos tenido el presentimiento de que fuera el Santo Padre». También a otros Obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas subir una montaña empinada, en cuya cumbre había una gran Cruz de maderos toscos como si fueran de alcornoque con la corteza; el Santo Padre, antes de llegar a ella, atravesó una gran ciudad en medio de ruinas y un poco tembloroso con paso vacilante, apesadumbrado de dolor y pena, rezando por las almas de los cadáveres que encontraba por el camino; llegado a la cima del monte, postrado de rodillas a los pies de la gran Cruz fue muerto por un grupo de soldados que le dispararon varios tiros de arma de fuego y flechas; y del mismo modo murieron unos tras otros los Obispos sacerdotes, religiosos y religiosas y diversas personas seglares, hombres y mujeres de diversas clases y posiciones. Bajo los dos brazos de la Cruz había dos Ángeles cada uno de ellos con una jarra de cristal en la mano, en las cuales recogían la sangre de los Mártires y regaban con ella las almas que se acercaban a Dios.
Este misterio ha sido muy cuestionado por permanecer en manos de la iglesia por más de 60 años, quienes se cree que decidieron qué debían mantener y qué debían ocultar para garantizar su poder o, quizás, evitar el pánico entre los fieles. Sin embargo, el Papa Juan Pablo II, quien hizo público el misterio, aseguró que ni una sola palabra se había modificado, y la publicación de un manuscrito de Lucía parece así garantizarlo.
¿A qué crees que haga referencia el tercer misterio? ¿Cómo explicarías el movimiento del sol presenciado por tantos testigos? Algunos han hablado de un ovni como posible explicación del fenómeno: ¿te parece que podría ser la verdadera razón?
Fuente de imágenes: 1: santos-catolicos.com, 2 y 3: indagadores.files.wordpress.com