Los lobos

186 libras por pulgada cuadrada. Carnívoros por excelencia; les encanta la carne y hasta los huesos de sus víctimas. Tan pronto perciben la sangre caliente, su instinto asesino se alborota. Pueden masticar perfectamente cualquiera de los huesos de los demás animales o humanos. Sólo les basta unas cuentas mordidas y sin esfuerzo alguno.

Los leones

Con una mordida catalogada en 620 libras por pulgada cuadrada. Dentro del grupo de los felinos más feroces, éstos no tienen tanta fuerza en su boca. Tienen un gran estilo de matar a sus presas, con sólo clavarles sus filosos dientes en la tráquea, así que de pronto esa sea la causa.

Los tigres

Su mordedura tiene la fuerza de 1.100 libras por pulgada. Caza completamente solo, a diferencia del león, aunque con el mismo estilo de estrangular a su presa. Son los felinos más grandes, con un peso aproximado de 350 kilogramos.

Las hienas

1.150 libras por pulgada. De la manera más fácil y práctica, son capaces de triturar todo el esqueleto de una enorme jirafa. Muchos leones astutamente se aprovechan de la fuerza y habilidad de las hienas y se roban sus presas, cuando ya están listas para el banquete.

Los osos grizzly

Son mucho más fuertes que las poderosas hienas. Con 1.250 libras por pulgada. Son terriblemente agresivos y letales. No obstante su enorme peso, se pueden movilizar a más de 60 kilómetros por hora cuando se lo proponen. Su comida principal son las nueces, pero cuando tienen la oportunidad de cazar no lo dudan.

Los gorilas

Con una sorprendente fuerza de mordida de 1.350 libras por pulgada, pueden triturar las plantas más fuertes como el mismísimo bambú. Afortunadamente son vegetarianos y no comen animales, ni humanos, pero sí pueden llegar a ser peligrosos si se les molesta, se ven amenazados o a los miembros de su familia.

Los hipopótamos

Aunque son de naturaleza hervívora, podrían llegar a atacar a los seres humanos y a otros animales, porque son muy celosos y violentos. Algunos narcotraficantes arrojaban a sus enemigos a los hipopótamos de sus zoológicos privados y eran triturados por sus enormes bocas, con la fuerza de 1.850 libras por pulgada.

Los jaguares

Casi siempre arrancan la cabeza de sus presas, con una mordida de 2.020 libras por pulgada, superando a todos los animales mamíferos del planeta. Sus dientes son tan fuertes que podrían atravesar el tieso caparazón de una tortuga.

Los cocodrilos de agua salada

Sin duda, son uno de los animales con mayor fuerza al morder: de 3.800 a 7.000 libras por pulgada. Nada podría sobrevivir al ataque de uno de estos ejemplares. Las posibilidades de que un ser vivo logre sobrevivir ante el ataque de uno de éstos, es demasiado mínima.

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