Para el ser humano, uno de los placeres más grandes que atrae a una buena mayoría, son los estados de embriaguez y los que producen ciertos alucinógenos, aunque esto representa un grave riesgo para la salud mental y física, además de las debidas implicaciones legales. Pero sorprendentemente, los humanos no son los únicos que disfrutan de alterar su Consciencia con algún estimulante, sino que también sucede en el reino animal. Veamos: “los animales más drogadictos del mundo”:
Los caballos
Algunas yerbas que suelen comer los equinos, llamada popularmente como “hierba loca”, provoca efectos alucinógenos en estos animales, con una visión muy distorsionada y serias dificultades de locomoción, aunque quedan muy relajados. Tiene cierto parecido a los síntomas que causa el alcohol en los humanos, pero mucho más aumentado. Por lo general la planta crece en lugares con estaciones y resulta muy atractiva para el animal. Algunos caballos se vuelven adictos.
El mono borrachín
Existe una especie de mono llamada el “cercopiteco verde”, que se siente muy feliz cuando logra entrar a escondidas a los cultivos de caña de azúcar, porque de inmediato se pone a buscar las cañas más viejas, pues se hayan en un proceso de fermentación y las chupa hasta quedar intensamente borrachos. De hecho, los científicos han confirmado que esta clase de monos prefieren mil veces una copa de aguardiente, que un vaso de agua azucarada.
Los gatos
Aunque parezca increíble, los gatos tienen su propio LSD, se le conoce como la “hierba del gato”, cuyo nombre científico es “Nepata cataria”. Se han hecho varias investigaciones y se comprobó que los felinos cuando la comen, pasan por los mismos síntomas que una persona que haya ingerido el ácido lisérgico. Esa planta es original de Europa, pero crece en varios lugares del mundo. Instintivamente los gatos se sienten muy tentados por comerla.
La musaraña alcohólica
Es un animal característico de Tailandia y otras regiones del continente asiático. A simple vista da la impresión de ser un animal muy tierno e indefenso, pero por las noches, varios de estos animalitos buscan la forma de embriagarse con el néctar fermentado de las palmeras. Esta sustancia equivale a 13 copas de vino en un humano. La diferencia es que no se embriaga, sino que al contrario, su metabolismo se favorece.
Las abejas briagas
Se ha descubierto que las abejas disfrutan demasiado consumiendo alcohol, bien sea el néctar fermentado, algo que se encuentren con licor, o inclusive el etanol en su estado puro. Pero cuando lo consumen quedan muy alicoradas y enfurecidas. Algo muy curioso es que cuando una abeja llega borracha a la colmena, no le permiten entrar hasta que regrese en sano juicio.
Los jaguares yageceros
Desde hace mucho tiempo, se sabe que a los jaguares les encantan los efectos de la ayahuasca o también conocida como yagé, una planta que nace en el Amazonas y sus cercanías, llamada científicamente “Banisteriopsis”. Sus sentidos se agudizan significativamente, cosa que les encanta, además de que se purgan al mismo tiempo.
Los wallabies
Estos animales son muy parecidos a los canguros y también viven en Australia, donde existen grandes plantaciones de opio. Esta sustancia les encanta a los wallabies, por lo que buscan esa planta obsesivamente para comerla y sentirse de maravilla. Les gusta tanto, que forman grupos y van saltando de manera circular hasta penetrar el cultivo y lograr su objetivo.
Imágenes: wikipedia.org (all)