British East Indian Company
Corre el año de 1780, y la Compañía Británica de las Indias Orientales se encontraba comenzando un esfuerzo de guerra para conquistar el poderoso Reino de Mysore, ubicado al sur de la India. En estos tiempos este Reino era un importante aliado de los franceses, enemigos históricos de los ingleses, y controlaba rutas centrales del comercio de las especias, las cuales despertaban el apetito de los capitalistas británicos.
Si bien la compañía actuaba en nombre del Imperio Británico, era a todos los efectos prácticos una empresa privada, que incluso reclutaba y pagaba a sus propios soldados. Por esta razón, estaba dispuesta a hacer un esfuerzo considerable en aras de conseguir un buen negocio. Y el control del Reino de Mysore era uno de los mejores negocios que podía haber.
Tras un intento fallido de ocupar la región, la Compañía comenzó una nueva operación. Pero en esta ocasión los habitantes de Mysore se encontraban preparados con una poderosa innovación tecnológica.
La Batalla de Polilur
El diez de setiembre de aquel año un contingente de unos 7000 soldados británicos se dirigió a la ciudad de Conjeevaram, un importante centro urbano del Reino de Mysore. Un número semejante de soldados indios se movilizó bajo la dirección del Sultán Tipu. Conocedores del terreno y con buen entrenamiento, los soldados indios fueron capaces de detectar la posición inglesa y posicionar a su vez sus nuevas armas: los flamantes cohetes de Mysore.
Hace pocos días hablamos aquí de la Hwacha, un sistema de misiles de flechas usado por los coreanos durante el siglo XVI para defenderse de la invasión japonesa. Si bien aquel es técnicamente primer sistema de misiles usado en la guerra, los cohetes de Mysore son el primer sistema de misiles explosivos capaces de impactar a muy largas distancias.
En efecto, si bien su puntería no era la mejor, estos misiles tenían un alcance de casi dos kilómetros, lo que les permitía atacar posiciones enemigas desde la seguridad de la distancia. Durante la batalla los británicos fueron acorralados y los misiles diezmaron sus formaciones y destruyeron las municiones que les quedaban, permitiéndole a Mysore una victoria decisiva.
Esta batalla fue fundamental durante las guerras entre los británicos y los diversos reinos de India porque demostró que aquellos no eran invencibles. Hasta entonces, los británicos habían avanzado con relativa facilidad en la región, pero partir de este momento quedó claro que eran humanos y podían ser derrotados fertilizando recursos adecuados.
La guerra duraría otros cuatro años, aunque finalmente terminaría con una victoria local y la retirada de los británicos. Lamentablemente para los indios, la compañía volvería, y aunque sería derrotada una vez más en la tercera guerra que luchaban, saldría victoriosa finalmente el último conflicto y conquistaría el reino en 1799.
Lo primero que hicieron los británicos al derrotar finalmente a este enemigo (que era además un bastión de influencia francesa en la región) fue ordenar la captura y recolección de los famosos cohetes, los cuales usarían para crear sus propias versiones en Europa. Inglaterra usaría estos cohetes con mucho éxito contra la Francia de Napoleón.
Fuentes:
- https://en.wikipedia.org/wiki/Second_Anglo-Mysore_War
- https://en.wikipedia.org/wiki/Mysorean_rockets#cite_note-1
Imágenes: 1: weebau.com, 2: quora.com