El descubrimiento fue realizado por el Telescopio Muy Grande de Chile (sí, así se llama, Very Large Telescope o VLT) y ratificado por el HUBBLE en torno a una estrella llamada AU Microscopii caracterizada por tener un Disco Circunestelar de Polvo. Parece ser que estaba rodeada de asteroides que han chocado entre sí con tal potencia que se han convertido en polvo.

La estrella es muy joven en términos estelares (unos 12 millones de años) y parece que en la nube de polvo está el germen de lo que será su futuro sistema planetario. Sin embargo, no es esto lo que ha sorprendido a los astrónomos.

“Ondas Espaciales”               

El descubrimiento se trata de una serie de ondas que según los investigadores “se asemejan a las ondas sobre el agua” y que aparecen en la nube de polvo que rodea la estrella. Las ondas se mueven a altísimas velocidades de más de 40.000 kilómetros por hora: aquellas más lejos de la estrella se mueven más rápido que las que se encuentran más cerca. De acuerdo con algunos astrónomos, algunas incluso podrían escapar de la región de influencia gravitacional de la estrella.

Y sobre qué son… bueno, ese es el problema. Usando modelos astronómicos podemos saber que no se deben a un choque de asteroides o a la hipotética explosión de un planeta. Tampoco parece deberse a la existencia de un planeta o estrella gigante en una órbita alejada de este cuerpo.

La única explicación es que esta estrella emita ondas de algún tipo, quizás que tenga “llamaradas” episódicas que impulsen la nube de polvo, pero esto es algo nunca antes visto. O quizás la fuente sea otra cosa.

En cualquier caso, es bueno ver de vez en cuando que aún queda mucho por descubrir y que no somos capaces de comprender del todo los misterios del universo en que vivimos.

Fuente de imagen: spaceanswers.com