Es la acción de causar que alguien quede en un estado de aturdimiento mental, como generarle un placer o una sorpresa tal que hagan que todo lo demás salga de su cabeza en ese instante, algo similar a lo que ocurre al estar enamorado o impresionado ante los hechos de alguien o que han ocurrido.
Para robar a alguien
Una de las estrategias que emplean algunos malhechores, es abobar a sus víctimas. Para ello, suelen hacer uso de narcóticos como la escopolamina u otros, cuyos efectos causan que la persona quede totalmente aturdida y desubicada.
Para engañar a toda una población
De acuerdo con varios investigadores, siempre se ha llevado a cabo un proceso de abobamiento de las masas, para que no puedan percatarse de las diferentes acciones corruptas de quienes los gobiernan. Entonces recurren a toda clase de entretenimientos y desinformaciones, como promover paridos de fútbol, reinados de belleza, chismes, etc.
Para hipnotizar
Prácticamente el hecho de abobar a otro ser humano, es similar a la hipnosis, técnica en la cual una persona induce a otra en un estado alterado de conciencia, muy cercano al sueño, pero sin dormirse por completo. En ese estado se le puede ordenar cualquier cosa al hipnotizado y éste no tiene otra opción que cumplir a cabalidad, así se le diga que crea que es un perro, éste así lo hará.
Para ganar una pelea
En las artes marciales, una muy buena estrategia de combate es abobar al contrincante. Para ello, se debe apelar a la tendencia de la mente humana a distraerse. En un combate, un solo segundo de desconcentración, puede significar la derrota. Por esta razón, los artistas marciales de la mayoría de escuelas y modalidades, insisten tanto en desarrollar el dominio sobre la mente y los entrenamientos muchas veces se enfocan en este aspecto fundamental.
