Con respecto al origen etimológico de la palabra “enciclopedia”, los especialistas refieren a que este vocablo proviene de la forma griega enkuklios paideia, lo cual podría traducirse literatmente como “círculo de instrucción” o “educación redonda”, por lo que desde su principio esta palabra plantea el objetivo primario de una enciclopedia: ofrecer al lector una imagen general de los conocimientos existentes en el mundo de las Ciencias, el Arte, la Filosofía, la Literatura, las Religiones, entre otros importantes saberes del conocimiento universal.

Breve historia de la enciclopedia

A pesar de que desde la antigüedad los sabios y hombres de ciencias han tratado de dejar plasmados en obras sus conocimientos, a fin de que otros puedan nutrirse a la luz de sus saberes e investigaciones, los historiadores consideran como primer antecedente formal de la enciclopedia a la Cyclopaedia de Ephraim Chambers, quien en 1728, produjera esta obra en la cual compilaba la mayoría de nociones y conocimientos universales.

Igualmente, los historiadores señalan que después de esta obra, en el siglo XVIII, un grupo de intelectuales conocidos como los enciclopedistas se manifestaron contra las nociones de su época, la cual consideraba a la iglesia y la metafísica como las únicas autorizadas a propinar conocimiento. En consonancia con su posición, estos intelectuales se dieron a la tarea de crear una obra en la cual se incluyera la totalidad de los saberes académicos que se tenían hasta el momento. Este proyecto fue uno de los más ambiciosos, conocidos en la época de la Ilustración, y llevó como nombre la Encyclopédie, y se inspiró básicamente en la obra de Chambers.

De esta forma, intelectuales de la Ilustración, como Diderot o el mismísimo Voltaire daban una firme respuesta contra el oscurantismo promovido por la Iglesia, así como por las autoridades políticas, construyendo una obra, que pretendía servir de acervo científico para aquel que se acercara a ella. Desde entonces, se conoce con el nombre de Enciclopedia a una obra que registra la mayoría de conceptos, definiciones y conocimientos del mundo de forma alfabética, a fin de que quien la lea pueda entrar en contacto con ellos, y darse una idea de cómo está conformado el mundo.

Características de los artículos de una enciclopedia

Aun cuando desde la creación de este tipo de obra se tenía en claro cuál sería la orientación y el trato que tendrían sus distintos artículos y entradas, con el tiempo estos cánones fueron definiéndose y perfilándose cada día más. Hoy en día, los editores de enciclopedias pueden dar cuenta de cuáles son las características con las que debe contar una entrada en una publicación de este tipo. A continuación, algunos de ellos:

Universalidad

El estilo y redacción de los artículos está hecho de la forma más universal posible, a fin de poder despertar interés en cualquier usuario que se acerque a su contenido, aun cuando la materia no sea de su preferencia. De esta forma, puede resultar entretenido aun cuando no se encuentre dentro del esquema de necesidades intelectuales de un individuo.

Atemporales

Así mismo, tanto por razones de producción, económicas e incluso de adquisición, las enciclopedias están diseñadas y redactadas de forma que su usuario pueda contar con ellas como libros de referencia por varios años o décadas. En este sentido, su contenido tiende a ser atemporal, es decir, que no pierde vigencia a medida que transcurre el tiempo.

Generalidad

Igualmente, los editores especializados en este tipo de obras indican que estas tienden a ser redactadas desde el conocimiento general hacia el conocimiento concreto, dando como resultado una información bastante completa, que hace que quien consulte la Enciclopedia tenga alcance a un conocimiento que le surta un panorama íntegro de un tema específico.

Objetividad

Finalmente, la Enciclopedia no busca generar polémicas, por lo que los artículos que en ella se establecen tratan de hacerlo desde la forma más ecuánime y equilibrada posible, buscando ante todo la objetividad, por lo que si se trata de un tema controvertido, el editor buscará comparar puntos de vista antagónicos, a fin de hacer referencia a las distintas posiciones, pero sin tomar alguna en específico, pues esta objetividad es esencial para lograr la Universalidad del texto.

¿Para qué sirve una Enciclopedia?

Desde el punto de vista histórico, la Enciclopedia fue creada con el fin de ofrecerse como un compendio de conocimiento universal que viniera a ilustrar al hombre común, a fin de salir del oscurantismo impuesto durante años por estructuras de poder, tanto político como religioso. En este sentido, la Enciclopedia parece haber triunfado, pues desde entonces se convirtió en la obra más buscada por padres preocupados por la educación de sus hijos, siendo incluso un artículo necesario en toda casa de familia.

Así la Enciclopedia se convirtió en símbolo cultural de estudio, aprendizaje y cultura general, pues le permitía a su usuario acceder a todo el conocimiento de la humanidad de una forma precisa y clara, a fin de dotarlo de un saber científico, filosófico y artístico con el cual pudiese enfrentarse al mundo.

Con la evolución y democratización de la Educación pública, la enciclopedia pasó a cumplir el papel de un libro de referencia, así como de apoyo, pues en él los estudiantes podrían encontrar e investigar aquellos temas vistos en clases, a fin de ampliar o precisar algún conocimiento en específico. Actualmente, las Enciclopedia cumple con su papel de obra de referencia, en la cual se pueden ubicar de forma rápida y acertada los distintos conceptos y definiciones, así como las fuentes de donde se ha tomado dicho conocimiento, con lo cual este tipo de obra también puede propinarle al usuario una bibliografía confiable. Así mismo, este tipo de obras también se ha adaptado a las nuevas tecnologías, pasando del papel también a la plataforma digital, en donde existen importantes enciclopedias que le ofrecen al internauta la posibilidad de acceder a un compendio universal de conocimiento objetivo sobre los saberes del mundo.

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