Es el adjetivo que describe a las personas o lugares que tratan con amabilidad y de forma agradable, a todos quienes los visitan.
Como un saludo acogedor
Saludar es un gesto del diario vivir y laboral, un signo de respeto y afecto hacia las demás personas, además de la oportunidad para caerle bien los clientes, compañeros o colaboradores. Por tal razón, un saludo acogedor y esforzarse en hacerlo de modo pertinente y cortés, resulta muy beneficioso para toda clase de relaciones, de acuerdo con aspectos como tiempo, lugares y la clase de gente.
Como una casa acogedora
Los expertos en psicología afirman que una casa acogedora conlleva muchas implicaciones psicológicas en quien ella mora, puesto que los seres humanos nos caracterizamos por la tendencia a formar “nidos” para conseguir una sensación de comodidad y seguridad.
Como una familia acogedora
Denominadas también como familias de acogida, son una especie de medida temporal de protección de menores, que no obliga a las personas que deciden acogerlos, a convertirse en sus padres de manera legal. Es una modalidad alternativa a la adopción.
Como un ambiente acogedor
Es un factor fundamental para que las personas que ingresan o permanecen en un sitio se sientan a gusto. Trae muchas ventajas, en todos los ámbitos. Por ejemplo en cuanto lo laboral, si existe un ambiente acogedor en el lugar de trabajo, está demostrado que los empleados se destacan mejor en sus actividades, al sentirse bien en el lugar en el que se ganan la vida. De otra parte, es un requisito para un establecimiento comercial exitoso, como un restaurante.
Como un restaurante acogedor
La mayoría de clientes le dan mucha importancia a la calidad de la comida y al servicio de un restaurante. No obstante, la ambientación acogedora que brindan detalles como las velas y otras decoraciones son el toque secreto del triunfo, que provoca a los clientes a repetir la experiencia.