El problema del plástico
A lo largo de toda su historia el ser humano se ha caracterizado por aprovechar lo mejor posible los recursos a su disposición. Con la aparición de nuevas tecnologías en los últimos 10.000 años – y en particular en los últimos 100 – cada vez más materiales quedaron a disposición del hombre, que se dispuso cada vez más de medios para mejorar su situación material y su capacidad de acción.
Hace varios miles de años fueron las rocas volcánicas, de gran dureza y resistencia. Luego vinieron los metales: primero el cobre y el estaño crearon el bronce, luego, vino el descubrimiento del acero. Entretanto, metales preciosos como el oro y la plata comenzaron a manipularse, y con el paso de los siglos cada vez más materiales se agregaron a esta lista.
En nuestra era, sin embargo, la batuta la han tomado los materiales sintéticos y, en particular, el plástico: muchos consideran que así como hablamos de “la era del hierro” o “la era del bronce” deberíamos hablar hoy de “la era del plástico”. El material es económico de producir, muy resistente e increíblemente versátil, pero tiene un problema: es prácticamente imposible de degradar.
Aunque puede reciclarse, hacerlo requiere una compleja red de transporte, limpieza y maquinaria que sencillamente no puede competir con los costos de producirlo directamente de la fuente – el petróleo – por lo que es una solución a largo plazo, pero no arregla el problema inmediato.
Y entre tanto, los océanos se llenan de plástico.
Material orgánico
En términos estrictos el plástico es un material orgánico, pues proviene del petróleo que, a su vez, se causó por la transformación de materia orgánica. En teoría, podría servir de alimento a alguna criatura microscópica.
Por décadas encontrar un microbio que se alimente de este material fue el sueño de cualquier encargado de un botadero. Al hacerlo, la criatura no sólo obtendría energía de un compuesto por lo demás imposible de degradar, sino que devolvería al ambiente sustancias útiles que, a su vez, podrán ser aprovechadas por otros organismos.
Y hace poco parece que este propósito se hizo realidad.
La bacteria que come plástico
Recientemente un grupo de científicos japoneses reveló que habían descubierto una variedad de bacterias capaces de utilizar el PET (una variedad de plástico ampliamente utilizada) como fuente de carbono, es decir, de energía. Las bacterias consiguieron crear una enzima capaz de deshacer el PET y usaron luego los componentes resultantes como base de su alimentación, generando compuestos que luego pueden ser fácilmente aprovechados por otras criaturas. En palabras de los científicos, las bacterias tomaban el plástico y lo convertían en “ladrillos para la vida”.
Esta es la bacteria capaz de comer plástico
Los gusanos que se alimentan de poliestireno
Pero los avances no se han dado únicamente en el campo del plástico PET. Una investigación realizada en septiembre del 2015 reveló que algunas especies de gusanos de la harina – cuyo nombre técnico es tenebrio monitor – son capaces de alimentarse casi totalmente de poliestireno extruido, una sustancia ampliamente usada en el campo de la construcción por ser prácticamente el único material aislante que no pierde sus propiedades al mojarse. A quienes no conocen el término quizás les resulte más familiar el nombre en inglés: styrofoam (en español se conoce como icopor, isopor, poliespuma, telgopor, esteorofón, espuma plast, entre otros).
Aquí vemos los gusanos alimentándose del poliestireno extruido
En efecto, el gusano tiene microorganismos en su tracto digestivo capaces de degradar el material – y parcialmente, otros tipos de plástico – y convertirlo en sustancias aprovechables. Otros insectos, como las cucarachas, también comen plástico, pero no lo convierten en compuestos biodegradables, por lo que no tienen el valor de los gusanos de la harina.
Resulta fascinante como la naturaleza misma termina por presentar soluciones a los problemas generados por una humanidad irresponsable que ha terminado por llenar de desperdicios su único hogar.
Fuente de imágenes: 1: fastcoexist.com, 2: news.softpedia.com, 3: blogs.discovermagazine.com