Quizás lo más conveniente, previo a exponer algunos de los remedios más populares de la web, en cuanto a blanqueamiento de la piel, sea revisar algunos elementos relacionados, tanto a las causas que pueden existir detrás del oscurecimiento de la piel o de una zona específica de ella, así como las precauciones que deben conocerse con respecto a tratamiento en exceso invasivos.
Blanqueamiento de la piel
En este sentido, se comenzará diciendo que se conocen como tratamientos blanqueadores de la piel al grupo de diferentes técnicas o procedimientos, que se lleven a cabo con la finalidad de lograr que algún segmento de la piel, o la piel es su generalidad, logren un tono mucho más claro del que ha adquirido por algunas situación en específico.
Sin embargo, estos procedimientos, lejos de realizarse solo por razones estéticas, en realidad constituyen parte de los distintos tratamientos que pueden acompañar a cualquier proceso de sanación o abordaje de enfermedades o condiciones crónicas de salud, puesto que por lo general el oscurecimiento en la piel no es un hecho aislado, producido por el tiempo o el clima, sino el reflejo exterior de algunas enfermedades autoinmunes o incluso ligadas al metabolismo.
De esta manera, el oscurecimiento de la piel puede ser producido por Vitiligo, Acné, Acantosis nígricans, cambios hormonales durante el embarazo, envejecimiento y diabetes. En consecuencia, el oscurecimiento de la piel no será una enfermedad en sí misma, sino el síntoma de un padecimiento mucho más delicados. Por ende, toda vez que se padezca o quiera comenzarse un tratamiento para reducirla, lo más adecuado será consultar con un médico dermatólogo, el cual es el profesional indicado para realizar los estudios pertinentes, que permitan diagnosticar el por qué la piel ha sufrido un oscurecimiento.
Tratamientos comerciales para blanquear la piel
Empero, muy pocas personas relacionan un cambio en la pigmentación de la piel con procesos metabólicos, hormonales o propios de una dolencia en el sistema inmunológico, sino que creen que se debe simplemente a la acción del sol y otros factores ambientales sobre la superficie de la piel, por lo que al momento de tratar de aclarar la piel recurren a cremas y tratamientos milagrosos, que de poder incidir en la tonalidad cutánea, logrando el blanqueado deseado, en realidad no están resolviendo el proceso de base, más allá de que usados inadecuadamente o exceso pueden poner en riesgo la salud.
Es por esto, que todo tratamiento cutáneo, en especial aquellos dirigidos a lograr que la piel recupere su tonalidad más clara, debe ser ordenado por un médico profesional, aplicado por personas capacitadas para ello, y sobre todo estar constituido por sustancias aceptadas por la Organización Mundial de la Salud, ya que por ejemplo existen tratamientos a base de una sustancia de nombre hidroquinona, elemento que aun cuando es usado en algunos casos, de forma estricta por los dermatólogos, en realidad es ilegal para su empleo estético o casero.
Así mismo, en el mercado estético no médico existen otras ofertas que prometen el blanqueado cutáneo, las cuales se comercializan a grandes costos y cuentan con gran popularidad, sin que las personas lleguen a conocer realmente cómo estas sustancias y sus componentes incrementan en la piel los riesgos de sufrir lesiones graves. Por otro lado, se puede encontrar un riesgo parecido con la aplicación de esteroides, hechas por personal no médico, en dosis inadecuadas o por tiempos no debidos, hecho que aun cuando pueda ocasionar el blanqueamiento requerido, en realidad implica un riesgo realmente serio para la salud.
Tratamientos naturales para blanquear la piel
En resumen, según recomiendan la mayoría de los textos médicos en relación con cualquier oscurecimiento local o extendido a nivel de la piel, lo mejor será siempre recurrir a un médico profesional, quien será el que investigue y establezca qué procesos del organismo han devenido en esta situación, la cual es apenas un síntoma.
No obstante, aun cuando los tratamientos complementarios, dirigidos a ayudar a la piel a que retome su tono natural pueden implicar técnicas especializadas como los peelings químicos, la aplicación de despigmentantes, el uso de tecnología láser o la dermoabrasión, la Medicina natural ha señalado que existen algunos elementos que pueden ser aplicados de forma casera, a fin de ayudar a la piel –toda vez que haya sido atendida la causa de fondo- a recuperar de nuevo su tono natural.
Por consiguiente, luego de que se haya consultado con el médico tratante y logrado la aprobación necesaria, toda persona que desee lograr un blanqueamiento en su piel, puede contar con distintas opciones de tratamientos naturales, entre los que se encuentran los siguientes:
Cebolla y dos componentes mágicos
Pese a que a casi nadie se le ocurriría aplicarse cebolla en la piel, debido al olor con el cual puede impregnarse esta, resulta que esta planta contiene dos elementos que pueden ser de gran ayuda a la hora de procurar el blanqueamiento de la piel: el azufre (componente que le da su característico olor) y la vitamina C.
Las fuentes naturistas que señalan esta opción como tratamiento natural para el blanqueamiento de la piel recomiendan que a la hora de administrarse lo mejor será procesar una cebolla en la licuadora, y luego con un algodón aplicar el zumo obtenido en la piel a tratar. No obstante, los portales que recomiendan este método advierten también sobre la necesidad de tener discreción al momento de aplicarla en la cara o cerca de los ojos, a fin de evitar que este componente pueda irritar el tejido conjuntivo.
Limón y avena
Otro de los ingredientes naturales que pueden resultar ricos en vitamina C, y por ende de gran utilidad en lo que al blanqueamiento de la piel se refiere es el limón, fruta que si llega a mezclarse con avena puede –a la luz de los especialistas en medicina naturista- crear una potente combinación, capaz de blanquear la piel y controlar incluso la producción de Melanina.
En este orden de ideas, las distintas fuentes que recomiendan este tratamiento señalan que la mejor opción para su uso será el tomar el zumo de un limón, y en el colocar la pulpa de otro, así como una cucharada de avena. Una vez preparada la mezcla, esta deberá ser colocada sobre la superficie de piel a tratar, dejándola actuar entonces por unos quince minutos.
Sin embargo, quienes aconsejan este método son también enfáticos en decir que esta mascarilla debe ser aplicada solamente durante la noche, puesto que el limón al reaccionar con los rayos solares pueden crear quemaduras y manchas en la piel. Por ende, la noche da la seguridad de que esto no ocurra, toda vez que cuando haya pasado el tiempo de aplicación de la mascarilla se lave con abundante agua la zona tratada, así como las manos.
Leche y piel blanca
Dice la Historia que Cleopatra, soberana del antiguo Egipto, se daba baños de inmersión en grandes cantidades de leche, para así mantener su piel hidratada, blanca y lozana. En este sentido, algunos cosmetólogos naturistas han indicado que la reina de Egipto no estaba del todo errada, pues ciertamente la leche constituye un elemento natural que cuenta con estas propiedades, por lo que puede ser de gran utilidad a la hora de procurar el blanquemiento de una zona de la piel, siempre y cuando no se sufra de alergia a los lácteos o algunos de sus componente.
A fin de usar la leche con este propósito, ya no será necesario reunir litros y litros para sumergirse en ella, tal como lo hacía la célebre reina egipcia, sino que bastará con aplicar un poco de este líquido en un algodón, y a su vez por medio de este en la piel que se busca acarar. Así mismo, algunas fuentes naturistas señalan que el yogurt, como derivado de la leche, cuenta también con propiedades que pueden ayudar a la piel a aclarar su tono.
Manzanilla y miel: infusión blanqueadora
Desde siempre se han conocido las grandes propiedades refrescantes que tiene la manzanilla, así como las cualidades hidratantes y antisépticas de la miel. Empero puede que pocos sepan que ambos elementos juntos crean una poderosa combinación, que cuenta con la capacidad de regenerar la piel, propinándole a esta un tono mucho más claro, al tiempo que puede ayudar a combatir las diversas manchas, lesiones o irritaciones que hayan podido surgir en ella.
Quienes recomiendan este tratamiento, señalan que lo mejor para usarlo será preparar una infusión de flores de manzanilla, y endulzarla con un poco de miel cuando se encuentre todavía caliente. Se dejará en reposo la preparación, y luego con ayuda de un algodón se aplicará en la zona de la piel que se busca aclarar. Este tratamiento podrá aplicarse unas dos veces por semana.
Dieta paleo para la salud
Finalmente, tal como refieren varios textos especializados, el oscurecimiento de la piel, bien en su totalidad o en zonas específicas es solo un síntoma de una dolencia o enfermedad interna, la cual es necesaria que sea descubierta o diagnosticada por el médico tratante. No obstante, estos textos señalan que casi siempre todo cambio en la hidratación y pigmentación está ocasionada por trastornos metabólicos, inmunológicos u hormonales, los cuales a su vez pueden tener una relación directa con los alimentos que se consumen.
En este sentido, la Dieta pelo o Dieta peleolítica plantea esencialmente que el hígado humano, en algunos casos, no ha evolucionado a la par de la industria alimenticia, por lo que puede tan solo procesar proteínas animales, vegetales y semillas, enfermándose en la medida en que debe enfrentar el aporte energético proveniente de los cereales, harinas y azúcares, con los cuales simplemente no sabe qué hacer.
De esta manera se genera una sobre carga de azúcar que empieza a convertirse en grasa acumulable, así como otras dolencias y condiciones, que a la larga se traducen en diabetes, infartos, cáncer de páncreas, hígado graso, cirrosis, entre otras. De estas dolencias, el oscurecimiento de la piel puede ser apenas un síntoma, por lo que entonces teniendo la enfermedad base en la alimentación, probablemente sea la corrección de esa alimentación lo que ayude a mantenerla controlada, puesto que la resistencia a la insulina -como es denominada la incapacidad hepática para procesar azúcares y cereales- no se cura, sino que se maneja, previniendo que aparezcan trastornos que acaben con la vida.
Por ende, la Dieta paleo puede ser una de las opciones naturales que ayuden a reducir la enfermedad que ha ocasionado el oscurecimiento cutáneo. Sin embargo, la decisión de eliminar el azúcar, las harinas, tubérculos y cereales para decantarse por un régimen nutricional basado en proteína animal, grasas, vegetales y semillas, es algo que debe ser en todo momento consultado con el médico de confianza y acordado con este profesional.
Imagen: pixabay.com