Clasificación de las Drogas

En este sentido, la Medicina plantea una clasificación, basada principalmente en los diferentes propósitos con los que han sido creadas, así como en sus distintos efectos. De esta forma, resaltan entonces tres principales tipos:

• Drogas médicas: sustancias creadas por la ciencia farmacéutica, a fin de ser empleadas en los tratamientos de síntomas y padecimientos médicos. Son consideradas legales, y se pueden adquirir en farmacias.
• Drogas nootrópicas: sustancias creadas por los laboratorios farmacéuticos, para potenciar las cualidades mentales del consumidor, como por ejemplo, la memoria o el ánimo. Son drogas legales y de libre comercialización.
• Drogas espirituales: son procesadas por las mismas culturas en donde han sido creadas o descubiertas. Su origen se remonta a épocas antiguas, siendo su principal función la de ayudar a entrar en trance al chamán o sacerdote, por lo que su uso es estrictamente religioso. Son consideradas legales.
• Drogas recreativas: sustancias fabricadas específicamente para producir alteraciones en el Sistema Central Nervioso del consumidor, en cuanto a su percepción sensorial e intelectual, modificando sus niveles de conciencia, conducta y personalidad. Estas sustancias pueden generar un alto grado de dependencia. Son consideradas ilegales, y su venta y consumo están prohibidos y contraindicados.

Clasificación de las Drogas recreativas

Sin embargo, aun cuando las instancias judiciales invierten millones de dólares y horas persiguiendo la industria del narcotráfico, éste sigue diversificando su mercado ilegal de Drogas recreativas, produciendo cientos de sustancias con distintos efectos y daños colaterales, las cuales se encuentran clasificadas por la Ley de la siguiente forma:

Según su grado de adicción

Este parámetro busca clasificar las sustancias de acuerdo al grado y tipo de dependencia, así como la posibilidad de rehabilitación que tiene el individuo. Entre ellas se distinguen:

• Drogas blandas: generan una dependencia psicosocial, es decir, que el individuo las consume para poder adaptarse a su entorno. Ejemplo de ellas: el tabaco, la Marihuana, el hachís.
• Drogas duras: sustancias que además de la dependencia psicosocial, generan también una dependencia física, haciendo que en ausencia de la sustancia, el individuo experimente graves síntomas de abstinencia. Entre ellas destacan la heroína, el alcohol, los barbitúricos y las anfetaminas.

Según sus efectos

Sin embargo, la Medicina también ha convenido crear una clasificación de Drogas recreativas, basada principalmente en los distintos efectos que pueden provocar. Al respecto, estas sustancias se clasifican de la siguiente manera:

• Narcóticos: destinadas a producir un estado de relajación o somnolencia, debido a la depresión del sistema central nervioso. Por ejemplo: la marihuana, la morfina, la heroína, los calmantes.
• Alucinógenos: alteran de forma importante los niveles sensoriales y de percepción del individuo. Por ejemplo: las anfetaminas y el Éxtasis.
• Estimulantes: cumplen con la función de estimular el sistema central nervioso, causando que el individuo se sienta con mayor ánimo y fuerza. Por ejemplo: el café, el tabaco, y en el ámbito ilegal la Cocaína.

Prevención del consumo de drogas

Aun cuando la discusión sobre las Drogas sigue dándose de forma general en torno a su legalización o no, es importante destacar que más allá de sus efectos placenteros, estas sustancias van generando una serie de consecuencias que influyen negativamente en su consumidor, y que abarcan distintos aspectos como  la salud física y psicológica, el entorno familiar y social, el desempeño laboral o físico. De esta forma, en la medida de lo posible se debe evitar su uso, puesto que la adicción es algo que nadie puede manejar, cayendo entonces en riesgo de sufrir sus consecuencias.

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