En el ámbito de la Literatura universal, se conoce con el nombre La tragedia de Hamlet, príncipe de Dinamarca (The Tragedy of Hamlet, Prince of Denmark, por su título en inglés) a una tragedia, nacida de la célebre pluma del autor inglés William Shakespeare, la cual fue publicada durante los primeros años del siglo XVI y XVII.
Sobre la obra
Conocida también simplemente como Hamlet, esta tragedia de Shakespeare constituye su obra más extensa, así también como la más influyente, tanto en la Literatura inglesa como universal. Así mismo, se cree que Shakespeare pudo inspirarse en dos fuentes distintas para componer su Hamlet, distinguiéndose entonces la leyenda de Amleth, así como el Hamley original.
Por otro lado, también existe un gran debate sobre el año exacto en que este autor inglés pudo haber escrito la obra, puesto que según hallazgos de los investigadores existen tres distintas versiones tempranas: Q1, Q2 y F1 –denominadas así por la Academia- y las que se pueden encontrar estructuras y hasta escenas diferentes, y que se creen fueron escritas entre 1599 y 1601, pese a que la primer publicación apareció en 1605.
Resumen de Hamlet
En cuanto a su contenido, como tragedia al fin, el Hamlet de Shakespeare aborda una historia familiar, en donde los temas principales son la traición, la venganza, el incesto, la corrupción, situaciones propias de la condición humana. Así mismo, Shakespeare toca en su obra el tema del destino y la locura –tanto la real como la fingida- como medio de escape a este, línea de fuga que sin embargo en realidad no ofrece una salida.
No obstante, al momento de establecer un resumen de esta obra, quizás lo mejor sea revisar de forma breve cuáles son los hechos que comprenden cada uno de los actos en los que su autor ha concebido la obra, la cual fue escrita originalmente como una pieza teatral, pese a que hoy en día se lea en ocasiones solo como una pieza literaria. A continuación, cada una de ellas:
Acto I
Al comenzar la historia sobre la familia real de Dinamarca, Shakespeare plante el primer acto en una noche fría en Elsinor, nombre que recibe el castillo en donde viven estos nobles. No obstante, son los centinelas los que inauguran el diálogo. Es así como Bernardo, Marcelo y Horacio –quien es el mejor amigo del príncipe Hamlet- hablan sobre la situación actual del país, señalando cómo el rey Hamlet acaba de fallecer, mientras que su hermano Claudio se ha desposado con Gertrudis, la reina viuda y madre del príncipe Hamlet. Así mismo, estos hombres se muestran preocupados por la invasión inherente que Noruega, con el príncipe Fortimbrás, quiere hacer a Dinamarca.
De igual forma, los centinelas Bernardo y Marcelo tratan de convencer a Horacio para que este hable con Hamlet, y le cuente sobre las apariciones que está haciendo el fantasma del rey. Es así como, después de escuchar a su amigo, Hamlet decide ir él mismo a encontrarse con el espectro de su padre frente a frente.
Hamlet logra conversar con el fantasma de su padre y rey, quien le cuenta como su hermano Claudio, tío de Hamlet ha vertido veneno en su oído, para matarlo y casarse con su esposa, es decir la madre de Hamlet. Sin embargo, la intención del fantasma no es solo enterar a Hamlet de lo sucedido, sino exigirle que en su papel de hijo y príncipe de Dinamarca vengue la memoria de su padre, matando a quienes lo han asesinado.
El fantasma del rey desaparece, dejando a Hamlet en un estado de angustia suprema, al no saber si lo que acaba de conocer es producto de la fantasía o de la verdad. Durante este acto, también se observa cómo Leartes advierte a Ofelia, su hermana y pretendida de Hamlet, que no vea más nunca a este príncipe.
Acto II
Este segundo acto se desarrolla mientras la invasión noruega guiada por Fortimbrás amenaza con derrotar Dinamarca. En consecuencia, la reina Gertrudis y su nuevo esposo y rey, Claudio se ocupan en defender el reino. Sin embargo, no pueden dejar de observar el extraño comportamiento del príncipe Hamlet, quien desde la aparición del fantasma de su padre, no ha podido aclarar sus pensamientos, sin saber si lo que ha visto y oído es producto de la verdad o de su fantasía.
No obstante, Claudio y Gertrudis no son los únicos que ven algo distinto en Hamlet. La propia Ofelia denuncia que el príncipe ha entrado a su habitación, y sin decirle palabra simplemente la ha visto fijamente durante unos minutos. Por su parte, Polonio convence a los reyes de que el mal de Hamlet reside en el amor, por lo que Claudio pide ayuda a este hombre para espiar a Hamlet, lo que los lleva a ver la explosión que este príncipe tiene cuando Ofelia le devuelve las cartas que él le ha escrito.
Hacia el final de este acto, al castillo Elsino llega una compañía de teatro, la cual quiere presentar su obra. Al enterarse Hamlet que la puesta que traen habla sobre la traición y el asesinato, este príncipe solicita a los actores a que hagan algunas modificaciones, logrando entonces que estos recreen el asesinato de su padre en manos de su tío.
Acto III
Tal como pretendía Hamlet, la obra que presentan los actores ante la corte logra inquietar al nuevo rey Claudio, quien unos instantes antes de que lleguen a la escena en la que se produce el asesinato del Rey, abandona el lugar, delatando así su culpabilidad. Sin embargo, Claudio está muy preocupado por la suerte de la mente de Hamlet, por lo que queriendo salvarlo de la locura, decide enviarlo a Inglaterra.
Por su parte, su madre, la reina Gertrudis, trata de hablar con Hamlet, para ver si encuentra una explicación sobre su extraño comportamiento. Oportunidad esta que es aprovechada por Hamlet, quien le reclama a su madre la apresurada boda que ha realizado con su tío Claudio. Mientras madre e hijo conversan, Hamlet escucha un ruido tras de la cortina, creyendo erróneamente que es el rey Claudio, quien ha decidido espiarlo, blande una daga y lo apuñala. De inmediato descubre que es Polonio quien los espiaba.
En ese momento, Hamlet ve de nuevo al fantasma, y establece una conversación con él. Su madre es testigo de todo, solo que ella no puede ver el espectro, por lo que concluye que su hijo está completamente loco. Asustada sale a buscar ayuda, mientras que Hamlet aprovecha esto para huir con el cuerpo de Polonio.
Acto IV
Empero, Hamlet no es al único que toca la locura. Ofelia ha perdido la razón, por lo que pasea cantando y hablando sola. Así la encuentra su hermano, Leartes, quien está de regreso a Dinamarca para vengar la muerte de su padre. Claudio ve en la decisión de Leartes la oportunidad perfecta para librarse de Hamlet, por lo que entonces convence a este hombre de que el único responsable del fallecimiento de su padre ha sido este príncipe.
Entre los dos planean entonces cómo matar a Hamlet, por lo que fraguan envenenar una espada para que Leartes rete a Hamlet a la pelea y tenga oportunidad de cortarlo y matarlo. Para asegurarse de que realmente muera, Claudio envenena una copa de vino para que si Hamlet sale ganador en la contienda, lo último que haga sea brindar por su victoria. No obstante, la conversación entre Claudio y Leartes es interrumpida por la reina, quien llega con la noticia de que Ofelia se ha suicidado saltando al río.
Acto V
En el funeral de Ofelia, Hamlet es avisado del duelo a muerte que le propone Leartes, quien ha decidido seguir adelante con el plan que él y el rey Claudio se han propuesto. Antes de que esto suceda, Hamlet le ha contado a su amigo Horacio cómo ha descubierto que Claudio ha mandado una carta a Inglaterra, en donde ordenaba que mataran al príncipe, pero que buscando torcer sus designios, él mismo ha cambiado la carta, pidiendo que maten a Rosencrantz y Guildenstern.
Durante el duelo, Leartes logra herir con la espada envenenada a Hamlet. Sin embargo, el príncipe termina intercambiando espadas con su rival, a quien hiere finalmente de muerte. Por su lado, la reina Gertrudis termina tomando por error de la copa envenenada, muriendo sin remedio. Ante el triste espectáculo, antes de dejar la vida, Leartes le confiesa a Hamlet cómo el rey Claudio es el que ha tejido el plan.
Enfurecido por todo lo sucedido, Hamlet logra matar a su tío y rey Claudio, cumpliendo entonces con su destino y con la petición hecha por el fantasma de su padre. Empero, el veneno que Leartes ha logrado introducir en su sangre al inicio de la pelea comienza a hacer efecto, por lo que Hamlet comienza a agonizar delante de su amigo Horacio, a quien le dice que no habiendo más herederos, le dé la corona al príncipe Fomtimbrás, líder de la invasión noruega a Dinamarca.
De hecho, un segundo después de la muerte de Hamlet, Fomtimbrás entra en la corte para descubrir el lecho de muerte y tragedia en el que ha sucumbido la corte de Dinamarca. Conociendo la historia, el nuevo rey decide ordenar honores militares para el príncipe Hamlet.
Imagen: retrato de William Shakespeare, autor de Hamlet / fuente: wikipedia.org