En el ámbito de la Literatura contemporánea, se conoce con el nombre de Pasaje a la India a una novela, nacida de la pluma del escritor inglés E.M Forster, publicada por primera vez el 4 de junio de 1924, gracias al trabajo de la editorial Edward Arnold.
Sobre la obra
Considerada una obra emblemática de la novela rosa, así también como de la ficción política, un Pasaje a la India narra una historia ambientada en el Raj británico, durante el movimiento independentistas de 1920, y que sirve como excusa para poner de manifiesto las relaciones sociales que surgían en torno a las distintas nacionalidades y religiones que coexistían en este país, que para entonces era colonia británica.
Así mismo, esta historia revela los problemas que esta coexistencia impuesta por medio de la colonización británica traían como consecuencia: racismo, abuso de poder por parte de la clase británica, clasismo, discriminación religiosa, entre otros. En cuanto a su trascendencia, las distintas fuentes literarias coinciden en señalar que Pasaje a la India se ha ganado su lugar como una de las cien mejores obras de la Literatura en lengua inglesa, de acuerdo al criterio de la Modern Library.
De igual forma, esta obra literaria se alzó con el Premio James Tait Black Memorial el mismo año de su publicación, en la categoría de ficción, además de haber sido incluida también en la lista de las “100 mejores novelas en inglés de 1923 a 2005”, realizada por la Revista Time.
Resumen de Pasaje a la India
Esta novela de E.M. Forster comienza con el viaje que hacen Adela Quested, maestra británica, y su futura suegra, la señora Moore, a la ciudad Chandrapore, localidad ficticia, que el narrador ubica en la India británica. Así mismo, el narrador presenta a otro de los personajes principales: el doctor Aziz, cuya introducción tiene lugar en la conversación que este tiene con dos amigos sobre si entre un indio y un inglés puede existir una amistad, interrogante que viajará por toda la trama.
Posteriormente, luego de un incidente con su coche, cuando va camino a cumplir con una cita impuesta por el médico superior del hospital donde trabaja Aziz, éste queda a la deriva en una carretera. Mientras transita por ella, rumbo al ferrocarril, este médico indio musulmán ve a un costado del camino su mezquita favorita, por lo que decide entrar a orar, sin sospechar que en ella se encuentra la señora Moore.
Fiel creyente, el doctor Aziz se molesta, instándola a que abandone el sitio, pues comete una profanación. No obstante, la señora Moore no se altera, sino que termina por mostrarle que cónsona con la religión, se ha quitado los zapatos, y además acepta que está en presencia de Dios. Un poco confundido, e incluso apenado, Aziz baja la guardia, quien termina conversando con la señora Moore, entablando así una nueva amistad.
Esta experiencia hará que tanto la señora Moore como su futura nuera sientan interés por conocer algunos indios, deseo que lleva al señor Turton a organizar una velada en donde coincidan invitados indios y británicos. Efectivamente, el evento tiene lugar, aun cuando la mayoría del tiempo queda en evidencia la profunda tensión que existe entre los dos grupos. Sin embargo, esta ocasión sirve para que Cyril Fielding, Adela, la Sra. Moore y el doctor Aziz acuerden ir a tomar té en una próxima ocasión.
Es así como en la próxima tertulia el ambiente es mucho más amigable, y el grupo se dedica a hablar varios minutos sobre la India y su cultura. De esta forma, entre un tema y otro, Aziz termina prometiéndole a Adela y a la Sra. Moore el invitarlas a las cuevas de Marabar, ofrecimiento que posteriormente se obliga a sí mismo a cumplir, creyendo que puede ofender a las damas de no hacerlo.
Finalmente, terminan yendo al paseo el doctor Aziz y las señoras. No obstante, en la primera cueva, la señora Moore sufre un malestar, producto de un ataque de claustrofobia, que la obliga a abandonar su intención de explorar las cuevas. Decididos a no perder el viaje, Adela y Aziz se adentran en las formaciones rocosas, acompañados de un guía.
En medio del viaje, Adela le pregunta directamente a Aziz si es verdad que tiene más de una mujer, pregunta que indispone a este médico indio musulmán, quien se adentra solo a una cueva, buscando calmarse. Sin embargo, al salir no encuentra a Adela, solo al guía, quien le informa que la mujer ha entrado sola a una cueva. Aziz va tras ella, temiendo que se pierda, pero sólo puede encontrar sus binóculos rotos, los cuales levanta. Aziz presiona al guía pero sólo hace que este huya.
Luego de que el guía ha escapado, logra ver a Adela abajo en la colina, mientras conversa con la señorita Derek, quien ha llegado hasta este paraje, acompañada por Fielding. Empero cuando Aziz desciende, ya Adela se ha marchado en el coche sin pronunciar una sola palabra, lo cual –además de la intriga- hace que Aziz deba volver en tren junto a la señora Moore, e incluso el propio Fielding.
Al regresar, Aziz descubrirá la razón de la repentina huida de Adela: esta mujer lo acusa de haber intentado abusar de ella durante el recorrido de las cuevas, situación que denuncia ante las autoridades británica, encendiendo las alarmas tanto de la población india, que se coloca del lado de Aziz, como de los británicos que refuerzan sus pensamientos racistas sobre los indios. No obstante, no todos los británicos creen en el testimonio de Adela, incluso su futura suegra no lo hace, por lo que su hijo, y prometido de Adela la embarca a Europa, viaje que la señora Moore no culmina, pues muere en altamar.
Por último, después de acusar a Aziz de haber intentado abusar de ella, Adela no puede hacer frente al proceso del juicio, sin siquiera poder contestar ciertamente si es verdad o no lo que afirmó en principio. De hecho, termina por aceptar que lo que ha ocurrido es que la profundidad de la cueva, en combinación con el eco, ha hecho que su mente se trastornara por un momento, confundiendo la sensación con la idea de que Aziz ha querido atacarla. Por ende, las autoridades no tienen más opción que desestimar el caso.
Pese a que esta revelación favorece a Aziz, quien queda libre de culpa, en realidad enfurece a la población británica, la cual ve en Adela una traidora a su cultura. Apenada, esta mujer permanece algún tiempo en casa de Fielding, puesto que hasta Ronny Heaslop, su prometido e hijo de la señora Moore rompe con ella. Luego de unos días, Adela parte a Inglaterra para no regresar jamás a la India.
Por su parte, Aziz ve en el apoyo de Fielding a Adela una traición a su amistad con él, por lo que se resiente. Con el tiempo, Fielding parte a Inglaterra, mientras que Aziz se traslada a Mau, estado hindú, en donde busca rehacer su vida, con la firma convicción de no volverse a hacer amigo de ningún hombre o mujer blancos. Con el tiempo, los dos amigos se reencontrarán y reestablecerán su amistad.
Imagen: retrato de E.M. Foster, autor de Un pasaje a la India / Fuente: wikipedia.org