La fotografía del Ovni, a la derecha, Sergei, a la izquierda
De los viajes en el tiempo
Una de las principales temáticas de la Ciencia Ficción es la posibilidad de desplazarnos en el tiempo, ya sea hacia el pasado o hacia el futuro, con la misma comodidad y precisión con la que lo hacemos en el espacio. Esto, que ha generado innumerables debates filosóficos (¿hay un tiempo o hay muchos? ¿Todo lo que pueda ir al pasado a realizar ya sucedió?) sigue estando, por ahora, por fuera de nuestras capacidades.
Sin embargo, algunas personas han afirmado ser viajeros en el tiempo o bien haber conocido alguno de ellos. Es el caso, que ya hemos visto en este artículo, de John Titor, y también el caso que veremos hoy de Sergei Ponomarenko, el viajero en el tiempo de Rusia.
Llegada al futuro
Nuestra historia comienza el 23 de abril del año 2006, cuando un hombre apareció en las calles de Ucrania aparentemente desorientado. Vestía de manera muy anticuada y tenía una vieja cámara en sus manos.
Las autoridades ucranianas pronto comenzaron a brindarle ayuda, para lo cual le solicitaron su documentación. Y es aquí donde comienza lo peculiar, pues según dijeron el hombre cargaba consigo un antiguo pasaporte soviético que decía haber sido emitido en 1950. El pasaporte, según quienes lo revisaron, era legítimo.
Ya en el hospital, mientras los médicos revisaban su caso, el hombre se presentó como Sergei Ponomarenko, preguntó la fecha y afirmó que venía del año 1950. Según contaba, se encontraba tomando fotografías en Kiev, donde estaba de viaje, cuando de pronto vio un objeto volador en forma de plato. Tras fotografiarlo, apareció en el Kiev de 2006. En su cámara, aseguró, estaban todas las fotografías sin revelar.
En efecto, ahí encontraron las autoridades varias imágenes de Kiev unas décadas atrás y la polémica fotografía de un ovni. Pocos días más tarde, Sergei desapareció de su cuarto: sencillamente se evaporó.
La imagen de Sergei en Kiev en 2050
Más viajes en el tiempo
Pero la historia no termina aquí. El hombre habría retornado a su natal Rusia a 1950, habría presentado varias entrevistas y vivido con su novia hasta 1970, cuando de nuevo sufrió un salto temporal, viajando esta vez al año 2050.
La prueba que nos queda de ello es una antigua fotografía que Sergei, por medios desconocidos, habría enviado a su mujer desde el año 2050 hasta el año 1970. En la fotografía dice “Estoy bien. Trataré de volver tan pronto como pueda”. Después de ello, no se vuelven a tener noticias de él.
La fotografía es bastante interesante ya que muestra a Sergei frente a un Kiev lleno de rascacielos en donde hoy no hay más que vegetación. De ser cierto el relato, Kiev habrá de crecer mucho en los próximos 35 años.
La carta en el reverso de la fotografía
Las dudas sobre el relato
Pese a que normalmente trato de encontrar tantas fuentes como sea posible (para evaluar diversas hipótesis), en este caso ello fue bastante difícil porque toda la información en la web parece estar en ruso y, bueno, yo no hablo un ápice de ruso. Por esta razón invito a quien pueda entenderlo a revisar este documental (en ruso, cómo no) en el que se cuenta la Historia de Sergei y se habla de la procedencia de las pruebas que ilustran su viaje.
En cualquier caso, el suceso parece casi demasiado fantástico para ser cierto. En un escenario como el de la Guerra Fría no me extrañaría que la información soviética no llegase a los medios norteamericanos, por lo que podríamos asumir que la ausencia de fuentes en inglés o español no prueba nada. Por esto mismo se hace necesario abordar el tema desde las mismas páginas rusas.
Fuente de imágenes: 1: survincity.com, 2 y 3: lamentiraestaahifuera.com
