La más imponente de las fuerzas naturales
De todas las fuerzas de la naturaleza, la electricidad es seguramente aquella a la que somos más vulnerables. Una sociedad – o un individuo – es capaz de adaptarse a determinadas circunstancias, de resistir terremotos, inundaciones y hasta sequías, pero es incapaz de prever una descarga eléctrica masiva, un relámpago, que de pronto se precipite hacia la tierra.
Es por esto que el dominio de la electricidad podría ser el más grande logro de nuestra sociedad moderna: no solo en términos de su alcance y sus infinitos usos, sino en términos del manejo de una fuerza que hasta hace tres siglos parecía demoledora, incontrolable. Ya en la antigüedad los habitantes de vastas regiones manejaron a su antojo el agua de las inundaciones y construyeron ciudades a prueba de terremotos, pero jamás fueron capaces de manejar la electricidad.
En la actualidad, un hombre clama haber realizado esta misma hazaña, solo que a un nivel más… individual, por decirlo de alguna manera. Slavisa Pajkic, oriundo de Serbia, afirma que es capaz de manipular las corrientes eléctricas e, incluso, de generarlas él mismo, y lo ha probado cientos de veces… ante el escepticismo de quienes lo consideran un fraude.
El Maestro de la Electricidad
Pajkic descubrió sus habilidades cuando era un joven de apenas 17 años: en una ocasión se encontraba con algunos compañeros cuando uno de ellos se recargó en una cerca que resultó ser eléctrica. El joven lanzó un alarido y pronto comenzó una apuesta sobre quién duraba mayor tiempo agarrado al metal. Con ventaja, la apuesta la ganó Pajkic.
Al tocar la cerca se dio cuenta de que no sentía nada. Su cuerpo parecía inmune a la corriente. Con el tiempo, fue descubriendo más y más habilidades, que van desde la simple resistencia a altísimos voltajes hasta la acumulación y manipulación de la energía eléctrica.
Al contrario que muchos otros súper humanos, Pajkic sigue siendo una persona extremadamente misteriosa. Es complicado encontrar información relativa a estudios científicos o al menos de aficionados que logren explicar las habilidades del individuo. Es también complejo encontrar un verdadero compendio de sus habilidades.
Las fuentes disponibles parecen mostrarnos a un verdadero hombre de otro mundo. Pajkic no sólo habría resistido un voltaje de 20.000 voltios en una ocasión (granjeándole un record Guinness que muchos afirman que jamás fue otorgado), sino que tendría un record por haber sido capaz de hacer hervir un litro de agua en menos de dos minutos y habría incinerado en varias ocasiones objetos que se le ponían en la piel solo mediante el uso de descargas eléctricas.
El hombre, además, parece haber sido capaz de cocinar una salchicha sosteniendo dos alambres, aunque en este experimento queda que la electricidad proviene de una fuente externa, en cuyo caso la hazaña quedaría muy reducida.
La explicación a las habilidades de Pajkic
Si bien algunos escépticos consideran a Pajkic un fraude en toda regla, otras personas creen que el hombre verdaderamente puede resistir altísimos voltajes aunque sea incapaz de generar corrientes eléctricas. La explicación al fenómeno estaría en su piel, que carece de glándulas sudoríparas y es particularmente aislante, por lo que impide que la corriente viaje a través de su cuerpo. En efecto, una mirada al hombre indica que hay algo muy particular en él, pues carece completamente de vello corporal, incluso de cabello, cejas y pestañas.
Esto ha llevado a muchos a afirmar que él en verdad es incapaz de generar o acumular corriente y solo es un “aislante humano”. Sin embargo, otros afirman que el hombre es realmente capaz de conducir, generar y almacenar electricidad, y para ello citan experimentos que en esta breve investigación fui incapaz de encontrar.
En cualquier caso, no cabe duda de que aquí hay un misterio. En este video, donde cocina la salchicha, está claro que la electricidad no proviene de su cuerpo, pero también que una capa milimétrica de piel está aislando una corriente increíblemente potente. Esto es algo bastante extraño, pues en teoría la sangre (que no es sino una solución de agua con electrolitos, entre otros componentes) es una excelente conductora. Es decir que o Pajkic no es humano, o su piel tiene propiedades realmente sobrenaturales, o es capaz de controlar, de algún modo desconocido, grandes corrientes eléctricas.
En todo caso, sea o no un fraude, el hombre hace cuestionar el verdadero alcance del cuerpo humano.
Fuente de imágenes: 1: 24sata.hr, 2: skepdic.com