Deportes y sexos
Todos sabemos que existen ligas separadas en cualquier deporte para hombres y mujeres. Si bien puede parecer un poco injusto en primera instancia, lo cierto es que se organiza de esta manera porque, en promedio, los hombres suelen tener un desempeño superior a las mujeres.
Esto no significa que todos los hombres sean más fuertes que todas las mujeres, claro, pero sí que en cualquier disciplina física los hombres mejores entrenados suelen vencer a las mujeres mejor entrenadas. Las razones son biológicas más que cualquier otra cosa: los hombres, por naturaleza, tienen mayor porcentaje de masa muscular, más peso y estatura, y un torso más ancho que permite la presencia de más músculo en brazos y espalda. Esto resulta en una ventaja en la mayor parte de las disciplinas.
En algunas, claro, la ventaja es femenina. La contextura del cuerpo femenino genera un centro de gravedad más bajo, lo que resulta útil, por ejemplo, en disciplinas como la gimnasia. Sin embargo, en estos casos la confrontación no es “directa”, sino que hay un jurado que indica cuál desempeño fue mejor, y por esto es difícil determinar objetivamente quién ganó (contrario, por ejemplo, a una carrera o un partido de fútbol).
Por ejemplo: existe una célebre competencia de triatlón llamada el Iron Man. Es una de las competencias más duras que existen en la actualidad; sin embargo, miles de hombres y mujeres la realizan cada año. En cada grupo de edad los mejores hombres superan de manera considerable a las mejores mujeres, precisamente por las diferencias corporales de las que hablamos más arriba.
Pero recientemente ha comenzado a popularizarse un oscuro y desconocido deporte en el que el ganador está clarísimo y, aún así, la tendencia es la contraria a aquella a la que estamos acostumbrados. La llamada “Ultra Natación”, o natación maratónica, presenta entre sus más exitosos miembros a mujeres, que esperan en la orilla a que los hombres las alcancen.
Ultra Natación
La Ultra Natación es el equivalente en el agua a una maratón en tierra. Esencialmente, es una carrera de resistencia en la que importa más la capacidad de nadar a velocidad constante por largos periodos que la capacidad de nadar rápidamente. Y esto parece hacer una gran diferencia.
En las carreras realizadas en los ríos de Nueva York, por ejemplo, el tiempo promedio de las mujeres en la carrera de la Isla de Manhatan supera al de los hombres en 15 minutos. Así mismo, en el Canal de Catalina las mujeres son en promedio siete minutos más rápidas que los hombres, y los dos récords (de ida y de vuelta) pertenecen a mujeres. En general, es a partir de las seis horas de competencia que las mujeres comienzan a dominar.
Causas
¿A qué se debe este fenómeno? ¿Por qué las mujeres son superiores en este deporte, y exclusivamente en este deporte?
Los investigadores que han analizado el tema dicen que se debe a dos factores principales: su duración… y la grasa corporal.
La duración es relevante porque entre más se demore una competencia menos relevante es la fuerza bruta, y más importante se vuelven cosas como la paciencia, la planeación, la técnica y la perseverancia. Todas estas son cosas que ambos géneros pueden desarrollar por igual, y esto lleva por ejemplo a que la diferencia en los tiempos de las maratones entre hombres y mujeres se haya ido reduciendo (y se espera que se sigan reduciendo, aunque no se sabe si alguna vez las mujeres lograrán comenzar a ganar). Como la mayor parte de los deportes no implica estos duros retos de resistencia la ventaja de los hombres suele estar mucho más clara.
Pero más importante aún, en el caso de la natación, parece ser la grasa corporal. Las mujeres no solo tienen más grasa en promedio que los hombres, sino que su cuerpo es más eficiente al usarla. Esto significa que cuando se agota el glucógeno (del que sacamos energía “rápida”) la disponibilidad de grasa y la capacidad de quemarla se vuelven fundamentales.
Adicional a esto, la grasa corporal tiene una densidad menor al músculo. Esto significa que para las mujeres mantenerse a flote requiere menos energía que para los hombres, lo cual no importa en distancias cortas, pero comienza a presentar un impacto fuerte en la energía del cuerpo en distancias largas.
En cualquier caso, la “ultra-natación” es un deporte relativamente poco conocido y practicado, por lo que algunos investigadores argumentan que la población que lo practica es demasiado pequeña para obtener conclusiones pertinentes. Sin embargo, el hecho de que prácticamente todos los récords (en particular en natación oceánica) los tengan las mujeres debería decirnos algo. Parece ser que hay al menos una disciplina donde las damas llevan las de ganar.
Está por verse si en el futuro, con el desarrollo de nuevos deportes, vemos otro tipo de competencias en las que el género femenino se quede con la victoria.
Fuentes:
- https://www.thecut.com/2016/09/the-obscure-endurance-sport-women-are-quietly-dominating.html
Imágenes: 1: thecut.com, 2: globalswimseries.com, 3: ultratri.co.za