Sus estudios abarcaron las ciencias naturales, el estudio del alma, las relaciones humanas, el pensamiento e incluso las artes. Se piensa que fue pionero de la Zoología, sus teorías y descripciones dominaron la Ciencia hasta el siglo XIX, aunque sus mayores aportes fueron a la Filosofía, siendo considerado el padre de la Lógica y generando un sistema de conceptos, que han regido el pensamiento occidental desde la edad Media, razón por la cual es catalogado como uno de los hombres más influyentes de la Historia.

Primeros años

Nació en Estáriga, Grecia, en el año 384 a.C. Su padre Nicómaco era médico del rey de Macadonia, Amintas II, abuelo de Alejandro Magno. Cuando Aristóteles era aún niño, Nicómaco falleció. De su madre, Phaestis, se sabe muy poco, por lo que se cree que también murió. Pasó al cuidado de Próxeno de Atarne, esposo de su hermana mayor, hasta que cumplió la mayoría de edad.

A los 17 años, fue enviado a Grecia, donde comenzó sus estudios en la Academia de Platón, institución donde permanecería por veinte años, siendo uno de sus discípulos más valiosos y más cercanos a Platón. No obstante, cuando el creador de la Academia falleció en el 348 a.C, su dirección fue asumida por Espeusipo. Aristóteles viajó a Assus, donde conoció y se hizo amigo del rey Hermias, con cuya sobrina, Pitia, se casó y tuvo una hija.

El Liceo

En el 338 a.C, fue tutor, en Macedonia, del hijo de Felipe II, Alejandro Magno, quien tenía 13 años. En el 335 a.C, después de que Alejandro sucediese a su padre y conquistara Grecia, Aristóteles regresó a Atenas. Con su permiso fundó su Liceo, centro de conocimiento, bautizado así por encontrarse ubicado en un lugar consagrado al dios Apololicio. Sus estudiantes eran llamados los “peripatéticos” (gente que viaja alrededor) debido a la práctica aristotélica de caminar mientras se desarrollaban las lecciones.

Su esposa Pitia murió el mismo año en que se inauguró el Liceo. Un tiempo después, inició una relación con Herpyllis, quien según algunos historiadores creen que podría tratarse de su esclava, a la cual habría liberado para casarse con ella. Tuvieron dos hijos, uno de ellos bautizado como Nicómaco, a quien Aristóteles dedicó una de sus Éticas.

Aportes científicos

Los descubrimientos de Aristóteles en el ámbito de la Zoología son amplios. Llegó a describir hasta 500 tipos de animales, de los cuales detalló hábitat, modos alimenticios y reproductivos. Creó una clasificación animal, según sus características similares, separándolos en dos grandes grupos: los de sangre roja y los que no la tienen, a los que llamó cefalópodos, esquema que dominó la Ciencia por siglos.

También estudió la fauna marina. Diseccionó y examinó cientos de especies de insectos, logrando identificar estructuras, que no fueron observadas de nuevo sino hasta la invención del microscopio en el siglo XVII, por lo que algunos historiadores le atribuyen una visión muy aguda.

Se interesó igualmente en el estudio de la Tierra y los fenómenos astrológicos. Logró identificar el ciclo del agua. Construyó una imagen del mundo impregnada de la herencia de sus predecesores. Basándose en Empédocles, concluyó que todo en la Tierra está compuesto por distintas combinaciones de cuatro únicos elementos: la tierra, el aire, el fuego y el agua. Influenciado por Platón, definió a la Tierra como centro del universo, alrededor de la cual giran todos los planetas. Instauró un método verdaderamente científico, basado en la contemplación y en la observación del objeto de estudio.

Filosofía

Uno de sus principales aportes al pensamiento es el concepto de la Lógica. Su intención era concebir un sistema de razonamiento que permitiera al hombre comprender su entorno, a través de la observación, la deducción y la inferencia. Uno de los grandes resultados de la Lógica aristotélica es el silogismo, deducción lógica que se infiere a partir de dos proposiciones.  También se preocupó por establecer un código moral bajo el cual se rigiera la conducta del individuo: la Ética, cuyo fin último es la búsqueda de la felicidad, que para Aristóteles radica en el ejercicio intelectual.

Principales escritos

Aristóteles escribió más de 200 tratados, de los cuales se conservan 31 de ellos. Se clasifican en “exotéricos”, para los no iniciados en Filosofía, y los “esotéricos”, destinados a los estudiantes del Liceo. Estos últimos fueron resguardados por Neleo, conservándose hasta hoy. Según Andrónico de Rodas, el corpus aristotélico estaría conformado por cuatro grandes grupos.

1) Los tratados sobre Lógica, llamados El Órganon: De las Categorías, Peri Hermeneia, los Primeros Analíticos, Segundos Analíticos, Tópicos y Refutaciones Sofísticas.

2) Tratados sobre Física (estudios de la naturaleza): Física, Del cielo, De la generación y la corrupción, Meteriológicos, Historia de los animales, Movimiento de los animales, Marcha de los animales, Del alma, De la sensación y lo sensible, De la memoria y el recuerdo.

3) Escritos sobre la Metafísica, conformados por catorce escritos, denominados así por Andrónico, por estar dispuestos después de los escritos de Física.

4) Las obras referentes al comportamiento, relaciones y arte: la Ética a Eudemo, Ética a Nicómaco, Ética mayor, Política, Poética, Retórica y la Constitución de Atenas.

Legado

Después de la muerte de Alejandro Magno en el 321 a.C, Aristóteles debió huir a Calcis, donde contrajo una enfermedad intestinal que cegó su vida en el 322 a.C. Su sistema filosófico y sus conceptos científicos fueron asumidos e inculcados como paradigmas del mundo a partir de la Edad Media tanto por cristianos y musulmanes. Incluso después de siglos y varias revoluciones intelectuales, sus preceptos filosóficos siguen conformando gran parte del pensamiento occidental.

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