Primeros años

Fue un eunuco y consejero de la corte del emperador chino He de Han. Se piensa que nació en Guiyang (actual Leiyang, ubicada en la provincia de Huan, China) durante la Dinastía Han Oriental. Luego de servir como eunuco en el Palacio imperial, en el año 89 d.C, se le asignó como encargado de una unidad de producción de armas. Aprovechando sus relaciones cortesanas, se convirtió en un visitante asiduo del Palacio. Según algunas fuentes históricas chinas, Cai Lun participó en un complot a favor de la emperatriz Dou, involucrándose en la muerte de la rival sentimental de esta. Después de la muerte de la emperatriz Dou, ocurrida en el año 97 d.C, Cai Lun se volvió aliado de la esposa Deng Sui, quien asumió el puesto de emperatriz.

Hacia el año, 105 d.C, Cai Lun fue designado por el Emperador para investigar el modo de poder perfeccionar el papel, ya que en ese momento, la escritura era hecha en piezas de seda llamadas chih, las cuales resultaban bastante costosas, o sobre tablas de bambú, bastantes pesadas, sin contar con lo frágil de los materiales, los cuales podían ser atacados por hongos y moho, destruyendo su valioso contenido.

Invención del papel

Cai Lun, entonces ideó un papel hecho a base de corteza de árboles, restos de fibra de cáñamo, retazos de tela y redes de pescar, haciendo posible la creación de un papel más liviano y resistente. Así mismo, implementó formas de impermeabilización, usando encolados a base de almidón de arroz, logrando un efecto de satinado, que protegía los documentos de los parásitos y el tiempo, consiguiendo un tipo de papel muy parecido al que conocemos hoy en día. De igual forma, la técnica usada por Cai Lun para la fabricación de este papel, en base a la perfección de los conocimientos antiguos, sigue siendo usada hoy en día por las grandes empresas. Aunque las máquinas actuales, distan mucho de las herramientas de la China del año 105 d.C, la industria continúa la antigua técnica de fabricar con la pulpa láminas de fieltro, suspendidas en agua, para después drenarla y proceder al secado, consiguiendo así una lámina de papel delgada.

Años finales

El emperador se mostró sumamente satisfecho ante su invento. El papel Cai, como se conoció en principio su invento era ligero, flexible, resistente, económico y podía ser producido en masa. El emperador le otorgó como reconocimiento, en el año 114 d.C, el título aristocrático de Márquez y una gran riqueza. No obstante, las intrigas cortesanas de las que había participado se volcaron en su contra. Al morir la emperatriz Deng Sui, la nueva esposa la emperatriz Song, ordenó que Cai Lun fuera a la cárcel. Para evitar su destino, Cai Lu tomó veneno y cometió suicidio en el año 110 d.C.

Legado

Su creación es una de las invenciones más importantes de nuestra era. En el siglo III, China popularizó el tipo y la técnica de fabricación de papel creados por Cai Lun, consiguiendo grandes mejoras en la alfabetización y la Educación, logrando además un gran soporte para el registro y difusión de los conocimientos. Lo cual hace que en su país sea conocido casi como un ser semidivino. En el resto del mundo, Cai Lun no es tan popular, aunque su invento haya traído consigo grandes avances. El papel de Cai Lun tardó algunos siglos en extenderse por el mundo, haciéndolo a partir del siglo XII, cuando llega a Europa, desplazando de inmediato los antiguos soportes en base a pieles de animales o de otras fibras. Desde entonces, la explotación de papel se convirtió en un gran medio de sustento y comercio para China, que más tarde fue seguida por los árabes y los japoneses.

En el año 1962, en lo que fue considerado por algunos historiadores de ese país asiático como aniversario número 1.850 de la fecha de su fallecimiento, el Gobierno chino rindió homenaje a su memoria en agradecimiento al invento con que Cai Lun transformó para siempre la Educación, la Ciencia y las Comunicaciones, permitiendo la transmisión de conocimientos, el registro de la Historia y el emprendimiento de una industria que enriqueció la economía de Asia y cambio el mundo moderno: el papel.

Fuente de imagen: quien.net