Oscar-Claude Monet (París, Francia, 14 de noviembre de 1840 – Giverny, Francia, 5 de diciembre de 1926). Mejor conocido como simplemente Claude Monet, fue un pintor de origen francés, y de gran reconocimiento mundial por haber sido uno de los mayores exponentes y promotores del movimiento artístico del Impresionismo.
En este sentido, algunas fuentes han señalado que incluso el propio término “Impresionismo” está relacionado con este pintor parisino, pues se cree que este movimiento tomó en préstamo esta palabra en base a la obra Impresión, sol naciente, pintada por Monet, en el año 1872, momento para el cual, Monet cumplía cerca de doce años como pintor impresionista, alejándose de los cánones establecidos por la Crítica de Arte, así como por el estilo realista que reinaba en Europa, decisión que pese a las terribles consecuencias económicas, en realidad parecía satisfacerle profundamente.
Primeros años
De acuerdo a lo que apuntan sus biógrafos, Oscar-Claude Monet nació el 14 de noviembre de 1840, en París, Francia, convirtiéndose así en el segundo hijo de los esposos Claude Adolphe Monet y Louise Justina Aubrée. Para el momento de su nacimiento, el padre de este futuro pintor era un próspero comerciante que se encargaba de importar y vender las especies provenientes de las colonias francesas de ultramar. Sin embargo, la fortuna no duraría para siempre, y ya par 1845, cuando el pequeño Oscar-Claude tenía cinco años de edad la familia atravesaba una situación económica tan grave, que tuvo incluso que dejar su casa, para trasladarse a un sitio un poco más económico, en la desembocadura del Sena, el cual sería la primera de muchas mudanzas en búsqueda de una mejor situación económica.
Primeros estudios
Pese a las condiciones poco estables que pudieron ofrecerles sus padres durante los primero años de vida, Monet recibió aprendió sus primeras letras de mano de sus padres, y otros instructores. Para los once años, sus padres lo matriculan en la Escuela Secundaria El Havre, en donde este muchacho estudiaría los próximos seis años y viviría una experiencia que le cambiaría la vida para siempre: recibir clases de dibujo, de manos del pintor francés Jacques-François Ochard.
Para ese momento, en consonancia a lo que citan sus biógrafos, Monet se perfilaba ya como un joven poco dado a la dinámica académica, prefiriendo encontrase siempre al aire libre, lo cual no significaba que no buscara estrategias para hacerse el rato en el aula un poco más llevadero, lo cual hacía dibujando divertidas caricaturas sobre sus maestras y compañeros, lo cual le fue haciendo ganar fama como un talentoso caricaturista.
Primeros pasos como pintor
No obstante, la diversión no llegaba allí, puesto que las caricaturas resultaban en ocasiones tan divertidas, que eran llevadas al escaparate de la marquería, lo cual le había hecho ganar gran fama en todo París, ciudad en donde había gente que le encargaba incluso caricaturas especiales. Monet a los 15 años ganaba dinero por sus caricaturas. Viendo su talento, el dueño de la marquetería se las arregló para presentarle a un pintor paisajista de nombre Eugène Boudin, quien lo alabó, recomendándole no limitar su talento sólo al dibujo de caricaturas, invitándolo a probar con el paisaje. No obstante, Monet no se sentía muy convencido con esta propuesta, pues en realidad a él no le agradaban los cuadros que Boudin ofrecía en la marquetería. No obstante, sería la muerte de su madre, ocurrida en el año 1857, la que determinaría las circunstancias precisas para que este joven Monet comenzara a pintar sus primeros paisajes, descubriendo en sí mismo su talento pictórico, y tomando la decisión de vida de ser pintor.
Visita a París
Ante esta nueva empresa, su padre quiso apoyarlo, ayudándolo a solicitar una beca ante las autoridades de El Havre, la cual fue negada. Sin embargo, los esfuerzos de su padre dieron frutos, pues el naciente pintor tuvo la oportunidad de trasladarse a París, ciudad en donde compartiría con algunos pintores como Gautier, tendría la oportunidad de visitar por primera vez el Salón de París, a donde asistió a una exposición, e incluso tuvo la buena suerte de lograr conseguir trabajo en el atelier de Monginot.
Durante los primeros meses todo fue de maravilla, pues su padre y su tía le apoyaban económicamente, hasta que empezaron las diferencias, puesto que Monet contrariaba a su padre, según la escuela en donde quería matricularse. Fue así como pese a toda exposición, Monet se inscribió finalmente en la escuela privada de pintura Academia Suiza, en donde se entregó al estudio de la figura. Durante esos años también mantuvo contacto con los artistas de Barbizon, al tiempo que frecuentó también el Brasserie des Martyrs.
Servicio militar
Cónsono con su edad, las autoridades francesas le solicitaron en 1861 que prestara servicio militar obligatorio, responsabilidad que sin embargo podía evadir con el pago de dos mil francos. En un intento por disuadirlo de la pintura y guiarlo al mundo de los negocios, el padre de Monet se ofreció a pagarlos con la condición de que Monet detuviese su entusiasmo pictórico y se empleara seriamente en el negocio que él manejaba. Monet decidió seguir con la pintura, y se alistó para pagar su servicio militar, permaneciendo un tiempo en la caballería de Argelia, donde contrajo fiebre tifoidea, enfermedad que provocó que fuera exonerado a tan solo un año de haberse alistado. Sin embargo, debió pagarle al Ejército un total de tres mil francos, a fin de librarse de los seis años de servicio que le debía al Estado. Esta vez consiguió el dinero de manos de su tía.
Formación como pintor
Librado de la obligación con el Ejército, Monet se entregó de lleno a su formación pictórica. En consecuencia, se integró a un grupo de estudio que asistía al atelier de Charles Gleyre. Fue con est grupo que Monet hizo su primer viaje a Barbizon, en donde pintaron algunos paisajes. Una vez cerrado el atelier, Monet continuó su amistad con Bazille, pintor con quien viajó al Canal de la Mancha, a fin de seguir pintando paisajes, hecho que molestó a su familia, quien le retiró mucho del apoyo económico que le daba. Mone tuvo que pedirle dinero a Bazille, aunque fue una de las pocas personas que conocía sus aprietos económicos, pues Monet seguía vistiéndose y comportándose como todo un dandi.
Durante esa época también tuvo la oportunidad de conocer a un grupo de intelectuales que planteaban una férrea oposición a todo lo establecido en el Arte y sus distintas manifestaciones, entre estos artistas, se encontraban también importantes pintores como Degas y Cézanne. Este contacto sembró el germen que lo impulsaría a romper con todo lo establecido en la pintura, para entregarse a la exploración de nuevas formas y estilos.
Fue así, como Monet empezó entonces a pintar paisajes en grandes formatos, lo cual se distanciaba del pequeño formato que venían trabajando los pintores parisinos. Así mismo, este pintor comenzó a dibujar la luz, llevando a sus pinturas el efecto de claro-oscuro, en donde se podían apreciar zonas totalmente blancas, en donde se veía la luz en su estado puro, y zonas totalmente oscuras, en donde la luz no penetraba.
Vida en Inglaterra
No obstante, la vida personal para Monet se le había colocado cuesta arriba, puesto que su familia había decidido retirarle por completo su apoyo luego del nacimiento en el año 1867, de su hijo ilegítimo, Jean. Luego de un intento de suicidio, e impulsado por la Guerra, Monet decidió trasladarse a Inglaterra, donde la suerte pareció sonreír. Fue en este país que conoció a Pissarro, importante pintor, que viendo la necesidad de Monet, le dio el apoyo económico que el artista necesitaba. Durante estos años también establecería amistad con Paul Durand-Ruel, así mismo conoció la obra de Turner, por la que sentiría gran interés.
Barco-taller
Así mismo, en 1872, Monet se enamoró de un paisaje, al cual decidió entregarse seguro de que en él aprendería la forma de captar la luz y sus reflejos, pues el agua le ofrecía el espejo luminoso y los matices y brillos que el buscaba. Fue así como se trasladó al estanque de Argenteuil, en donde pintó muchas de sus célebres obras. Así mismo, logró hacerse con una pequeña embarcación, sobre la que construyó su taller, en el cual trabajaba mientras navegaba por el agua, captando cada uno de los estados de la luz sobre la superficie.
Movimiento Impresionista
En 1874, dos años después de su intenso trabajo, tuvo lugar en París la primera Exposición Impresionista, la cual contenía muestras de su trabajo, y que de hecho fue bautizada así por el crítico Louis Leroy, quien en un intento peyorativo hacia lo que era conocido en ese momento como el grupo de Monet, usó la palabra impresionismo, basándose en la obra de este pintor Impresión, sol naciente. Sin embargo, es posible que tanto Monet como Lerooy no fuesen conscientes de que con esta exposición, así como con el uso de la palabra Impresionismo, se estaba creando el primer ismo moderno, del cual además Monet era tomado como el jefe del grupo.
No obstante, para 1880, ya Monet no quería participar en exposiciones de corte impresionista. De hecho a partir de ese momento, aun cuando seguía fascinado por la luz y las formas, su búsqueda lo obligaba a alejarse de la espontaneidad inicial, buscando formas mucho más complejas y poética, que pudieran expresar el sentimiento de su visual. En 1883 toma la decisión de mudarse a Giverny junto a su segunda esposa Alice Hoschedé.
El jardín de Giverny
En su nuevo hogar, y durante las próximas tres décadas de su existencia, Monet se entregó a la construcción de su propio jardín de agua, en donde contaba con un arroyo, un estanque construido por él mismo, y en donde podían apreciarse hermosos nenúfares, que yacían tranquilos en el agua mientras los sauces y otros árboles se alzaban imponentes hacia el cielo, sirviendo de marco al hermoso puente japonés. Esta paisaje idílico que Monet se dedicó a construir con sus propias manos y dinero, se tradujo en numerosas obras pictóricas como El estanque de las ninfeas (1900) o El puente japonés (1918). Obras estas que afianzaron la fama de este pintor. Ya para esta época su búsqueda lo llevaba a entregarse a la naciente abstracción que iba poblando la printura occidental como respuesta a la larga tradición de la pintura figurativa, por lo que Monet puede ser considerado igualmente como un importante antecedente de lo que sería después el Arte abstracto.
Últimos años
Consciente de que el ocaso de su vida se acercaba, Claude Monet se dio a la tarea de destruir muchos de sus bocetos, ensayos o estudios, pues como él mismo declaraba quería asegurarse personalmente que estos papeles y lienzos no se comercializaran en el mercado de Arte, después de su muerte, tal como sucedió con los que no llegó a desaparecer antes del 5 de diciembre de 1926, cuando falleció en Giverny, Francia, debido –según lo que citan varias fuentes- a cáncer de pulmón. El pintor tenía 86 años.
Imagen: obra Autorretrato en Beret, Monet (1886) / Fuente: wikipedia.org