Conocido como el Astro Rey, por ser el centro del sistema planetario al cual pertenece nuestro planeta, el Sol constituye la principal fuente de energía, calor y luz para todos los seres de la Tierra, los cuales tardarían apenas una semana en comenzar a morir y desaparecer si algún día su luz se acabara.
Estudiado con gran pasión por físicos, astrónomos y químicos, el Sol también constituye todo un campo de investigación, pues se sospecha que en su funcionamiento hay mucho que puede entenderse sobre la formación de nuestro universo, la creación de elementos químicos y la aparición de la vida sobre la Tierra. En esta ocasión, presentaremos entonces una serie de características del Sol, a fin de que conozcamos un poco más de este astro, que con su luz y fuerza hace posible que todos los ciclos funciones a perfección en la naturaleza. A continuación algunas de las cualidades del Sol:
Características físicas del Sol
A pesar de que la mayoría cree que el sol es un planeta, en realidad se trata de una estrella, catalogada por los astrónomos como una estrella enana amarilla, la cual se caracteriza por convertir, constantemente en su núcleo, el Hidrógeno en Helio, a través de un proceso de fusión nuclear. Así mismo, esta condición nos advierte que algún día el Sol se extinguirá, pues es lo que sucede cuando una enana amarilla termina de consumir sus reservas de Hidrógeno, al hacerlo, se apaga. Sin embargo, tarda aproximadamente unos diez millones de años en hacerlo. En cuanto a nuestro sol, su edad se ha calculado en unos cuatro mil seiscientos o cuatro mil setecientos millones de años, por lo que aún le quedan como seis millones de años de vida.
Así mismo los astrónomos creen que su estructura es casi esférica, presentando un ligero achatamiento en los polos. De igual forma se ha calculado su radió en unos seiscientos noventa y seis mil doscientos cincuenta y seis kilómetros de longitud (696.256 Km). Por su parte su dimensión total ha sido fijada en un millón trescientos noventa y dos mil trescientos cincuenta kilómetros (1.392.350 Km) es decir cien veces nuestro planeta.
Distancias entre los planetas y el Sol
El Sol es el centro del Sistema Solar, alrededor del cual giran ocho planetas, entre ellos el planeta Tierra, los cuales guardan distancias diferentes en relación a este astro. De acuerdo a las mediciones realizadas por los astrónomos y físicos los planetas se encuentran a las siguientes distancias del Sol: Mercurio (cincuenta y siete millones de kilómetro; 57.910.000 km); Venus (ciento ocho millones doscientos mil kilómetros; 108.200.000 Km); La Tierra (ciento cuarenta y seis millones seiscientos mil kilómetros; 146.600.000 Km); Marte (doscientos veintisiete millones novecientos cuarenta mil kilómetros; 227.940.000 Km); Júpiter (setecientos setenta y ocho millones trescientos treinta mil kilómetros; 778.330.000 Km); Saturno (un billón cuatrocientos veintinueve mil millones cuatrocientos kilómetros; 1.429.400.000 km); Urano (dos billones ochocientos setenta millones novecientos noventa mil kilómetros; 2.870.990.000 Km); Neptuno (cuatro billones quinientos cuatro mil millones trescientos mil kilómetros; 4.504.300.000 km).
Igualmente, los científicos han calculado que un rayo de luz solar demora aproximadamente unos ocho minutos en llegar desde la superficie del Sol hasta la tierra. De igual forma la Tierra demora un total de trescientos sesenta y cinco días en darle una vuelta completa al sol, lo que determina la duración de un año, el cual en ocasiones (cada cuatro años) puede tomarse trescientos sesenta y seis años.
Gravedad del Sol
En cuanto a su fuerza gravitatoria, el Sol cuenta con una gravedad equivalente a 274 m/s2 (unas veintisiete coma nueve gravedades terrestres) lo cual representa unas inmensa fuerza gravitacional que hace que el resto de los planetas orbiten a su alrededor. Así mismo los astrónomos han podido determinar que el Sol sufre de cambios de polaridad cada once o doce años, sin que esto parezca afectar de forma significativa las órbitas planetarias.
Tormentas y manchas solares
Al igual que cualquier cuerpo espacial, el Sol también cuenta con fenómenos en su superficie, entre los cuales se encuentran las denominadas tormentas solares, las cuales suceden casi siempre después de que el ciclo solar ha alcanzado su máxima actividad. Están estrechamente ligadas a los cambios de polaridad del Sol, y se estima que la última tuvo lugar en el año 2011, prolongándose por dos años. Durante una tormenta solar se producen cientos de violentas explosiones de plasmas, fulguraciones, así como eyecciones de masa coronal.
De igual manera, el Sol cuenta en su superficie con manchas oscuras, que son llamadas manchas solares. Básicamente se trata de una región solar que presenta una temperatura más baja que la región por la que se encuentra rodeada. Los astrónomos han llegado a calcular que una sola mancha del sol puede llegar a medir hasta doce mil kilómetros (12.000 km) por lo que se dice que en una sola mancha solar puede caber la Tierra.
Implicaciones del Sol en la Tierra
Considerado la máxima fuente de energía, el Sol proporciona al planeta Tierra las condiciones necesarias para que en él haya vida. En este sentido uno de los aportes fundamentales es incidir directamente en la fotosíntesis, la cual hace posible la existencia de plantas, sustento de la cadena alimenticia. Igualmente produce el calor y la luz necesarias para procesos vitales, como la condensación del agua, el ciclo de la lluvia, u otros fenómenos climáticos como las tormentas, lo cuales produce al calentar las masas de aire.
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