Unos audífonos

Sin importar si se ven de muy buena marca y en perfecto estado, pero al usar cosas tan personales, existe un gran riesgo de adquirir infecciones auditivas y enfermedades, por las bacterias de la persona que los portaba.

Anillos, aretes y demás joyas

Puede tratarse de un truco de asalto. Consiste en que la persona caiga en la tentación de levantar el objeto al parecer lujoso, y en ese instante aparece un individuo que también la vio al mismo tiempo, diciendo que se trata de una joya muy valiosa y que como la vieron juntos, deberían repartir el dinero y proponiendo que se le pague esa parte a él. Entonces, la víctima se va con la joya y luego descubre que era una baratija que poco o nada vale.

Insectos brillantes atractivos

Los colores fuertes en los animales, significan un llamado de alerta de la misma naturaleza a las demás especies, de que esas criaturas son peligrosas y venenosas, especialmente con toda la variedad de insectos. Algunos curiosos que han tomado en sus manos alguno de estos animalitos, han sufrido las consecuencias en enfermedades y varios días hospitalizados. Dicen popularmente, que “la curiosidad mató al gato”.

Un bolso, un fajo de billetes o una billetera

Lo correcto en el caso de encontrar algo similar, sería ayudar a esa persona que por descuido seguramente, los habría perdido. A lo mejor también van sus documentos de identidad y demás papeles importantes. Si se elige no hacerlo y recogerlos, hay una alta probabilidad de que sea otro truco de asalto, en el que los ladrones ubican estas cosas como una carnada y en seguida sale un sujeto alegando que son sus pertenencias, extorsionando al incauto con una suma de dinero para no acusarlo con la policía. Igualmente, podría ser una trampa para implicar a un chivo expiatorio en algún delito. Entre muchas otras artimañas.

Agujas y jeringas

Pertenece a los elementos más peligrosos que se puedan recoger en la calle, puesto que lo más seguro es que se hallen infectadas de alguna clase de virus e infección, lo cual podría ser letal. Las posibilidades de que sea SIDA son mínimas, ya que el VIH a los pocos minutos de salir del cuerpo, muere totalmente. Pero sí podría tratarse de hepatitis, tétano o algo peor.

Granadas, balas, o equipo militar

Estos objetos pueden llegar a explotar si se manipulan en condiciones y de modos erróneos. Los casos más comunes son de minas antipersona, que suelen localizarse en zonas rurales y en otrora campos de guerra. Así parezca que ya han estallado, lo más pertinente es no tocarlos y avisar a las autoridades.

Sim cards

Los inconvenientes mayores devienen al momento de insertarlas en un teléfono. Varias cosas podrían pasar: lo primero, que se bloquee de inmediato el dispositivo, así como adquirir las deudas pendientes con la compañía que pudiese haber tenido el propietario. El peor escenario es que con esa tarjeta chip se hubieran cometido delitos, en cuyo caso pondría en riesgo nada más ni nada menos que la libertad y la honra.

Cachorros o animales recién nacidos

Por más tentación que se sienta de acariciarlos y tocarlos, se debe pensar en las consecuencias para estos pequeñines, ya que pudiera ocurrir que la madre al sentir que fueron manipulados por extraños, los rechace y eso sería la muerte para ellos.

Armas y cuchillos

Es un gravísimo error. La razón es que algún criminal después de un acto delictivo, las haya arrojado en ese lugar para deshacerse de la prueba principal. En el instante de llevar el arma a las manos, ya se está implicado en un procedimiento judicial si es que existe, porque las huellas dactilares quedan grabadas. En vez de tocarlas o recogerlas, lo mejor es llamar a la policía.

Imagen: wikipedia.org