En esta época de crisis hay un hombre que se ha propuesto innovar y parece que lo ha conseguido. El austriaco Andreas Strauss, decidió que dormir en un paraje de ensueño no debería ser caro y sí sencillo, y se propuso utilizar las tuberías de alcantarillado, eso sí, limpias y con las comodidades precisas

Conexión a Internet, ventanas que miran hacia las estrellas, un emplazamiento ideal en un parque a orillas del Danubio, donde casi cada noche hay un concierto y se puede pasear en barca. Visto así parece que lo ultimo en lo que pensamos es que dormiremos en un tubo de hormigón. Simple, pero bien pensado.

El hotel esta en Ottensheim, Austria, a menos de 200 km de Viena. Está compuesto por varios tubos, eso sí, si en medio de la noche tienes ganas de hacer pis debes usar los baños del parque (nada es perfecto).

Aunque quizás la ventaja más importante de este lugar es su precio, y es que no tiene, cada uno fija la tarifa que desee, y según su dueño, la gente suele ser generosa, será que se descansa bien en la cama de matrimonio que tiene en su interior

Solo funciona de mayo a octubre, se ve que en los meses más fríos, deja de ser tan confortable, quizás por que no hay sitio para un radiador, y se puede usar desde las 15:00 h hasta las 12:00 del día siguiente.

¿Os interesa?, las reservas en su página oficial: https://www.dasparkhotel.net/
Vamos, un hotel casi perfecto, excepto si sufres claustrofobia

Fuentes:

 https://sobreturismo.es/2008/07/07/hoteles-raros-das-park-hotel-no-apto-para-claustrofobicos/