Si bien, como lo comentamos en ese momento, la complejidad del cerebro de un mamífero hace difícil en pensar en un control mental de este tipo, es imposible saber si en un futuro evolutivo lejano no ocurrirá también.

En esta lista dejamos por fuera algunas especies. Dementor es una particularmente interesante y macabra, y a ella le dedicamos este artículo.

Dementor

Se denomina Dementor a una especie de avispa cazadora de cucarachas nativa de Taliandia (Ampulex Dementor). La avispa apenas se descubrió en el 2014, y tiene un comportamiento sorprendente.

Todas las avispas son carnívoras, y cazan presas específicas para darle alimento a sus crías. La mayor parte paraliza sus víctimas para que los sistemas biológicos se mantengan funcionando y la carne no se pudra. Los insectos, literalmente, son comidos vivos desde adentro.

Sin embargo, Dementor va un paso más allá.

Su toxina no paraliza la cucaracha, sino que la pone en una especie de trance. El sistema nervioso central de la presa se desactiva, aunque su sistema muscular siga funcionando. Por un mecanismo que no comprendemos del todo, la cucaracha comienza entonces a seguir un rastro olfativo que deja la avispa, caminando hasta su madriguera y permaneciendo allí.

De esta manera la avispa puede cazar una cucaracha significativamente más grande que ella, sin ningún problema a la hora de llevarla a su nido. Tras esto, pondrá huevos en ella y sus crías se alimentarán lentamente de su carne, hasta que sea hora de emerger y buscar una nueva cucaracha.

Un asunto realmente macabro. Pero la naturaleza, en cualquier caso, nunca se ha caracterizado por ser particularmente delicada.

Imagen: wikipedia.org