La leyenda de las Guayanas
Olvidadas por la cultura popular, las Guayanas (Guyana, Guayana Francesa y Surinam) son tres pequeños países ubicados en la costa nororiental de América del Sur, al oriente de Venezuela y al norte de Brasil.
Con una población muy pequeña (de apenas 800.000 en el caso de Guyana, el más poblado, y poco más de 250.000 para la Guayana Francesa) y en la frontera entre los llanos, el Amazonas y el Atlántico, los tres países componen una región llena de selvas perdidas, grandes ríos nunca navegados y, ante todo, criaturas misteriosas que rondan lugares desconocidos.
Una de las más conocidas es el llamado “Hombre simio” de Guyana, conocido como Didi por los nativos de la región. Pero más allá de sus semejanzas con otros humanoides, Didi tiene algo que lo diferencia de todos sus homínidos homólogos: tiene unas poderosas garras que lo convierten en una bestia realmente peligrosa.
La leyenda de Didi
Los antepasados de los seres humanos se originaron y desarrollaron en África, y se esparcieron relativamente pronto por el viejo continente. Es por esta razón que leyendas como Almas o Agogve suelen tener tanta fuerza, mientras que otras como Pie Grande suelen ser vistas con mayor escepticismo.
¿Un perezoso gigante?
Por esta razón es problemático pensar que Didi es un pariente cercano de los seres humanos. Pero resulta que las características de dicha criatura no coinciden sólo con las de un ser humano, sino con las de los perezosos gigantes que habitaban las regiones de América cuando llegaron los primeros humanos y de los que ya hemos hablado en este artículo.
Algunas teorías, entonces, le apuntan a caracterizar esta criatura como un perezoso gigante. Varias cosas coinciden, sus hábitos selváticos, sus garras gigantes, su dieta omnívora y la tendencia a agredir a quien se acerque demasiado.
¿O un antiguo pariente de los seres humanos?
Pero no todos están convencidos de la teoría del perezoso gigante. Un jefe local llamado Damon Corrie realizó la década pasada algunas pequeñas excavaciones que lo llevaron a encontrar objetos que se presentaron como armas y escudos… solo que de un tamaño más que exagerado para cualquier ser humano. Los perezosos no hacen armaduras, por lo que la solución más obvia es que fueron hechas por un homínido.
Un reporte de los 1950’s narraba un encuentro entre un cazador y un gigantesco Didi que dormía en lo que parecía ser una hamaca hecha con elementos increíblemente sencillos. El hombre pasó a su lado haciendo lo imposible por no despertarlo y una vez se encontró a una distancia considerable huyó desesperadamente. Logró llegar a casa a salvo, pero la cosa no terminó allí.
El hombre pronto cayó gravemente enfermo. La tradición decía que se debía a la poderosa magia de Didi, pero de acuerdo con los médicos que lo visitaron era más que todo una reacción al estado de shock. Afortunadamente el hombre se recuperó.
La expedición de 2007
En el año 2007 una organización conocida como UK Center of Fortean Zoology realizó una expedición importante con miras a encontrar evidencias de la existencia del llamado Didi. La expedición fue incapaz de encontrar un individuo, pero sí recolectó pruebas de quienes dicen haberse encontrado con él.
Algunos residentes de la villa de Taushida, por ejemplo, le contaron que hacia el año 2003 había ocurrido un evento en el que una de estas criaturas habría secuestrado a una pequeña. El único testigo del suceso fue su hermano, que vio aterrorizado como un monstruo peludo salió de la densa selva, agarró a la pequeña con sus garras y volvió a internarse entre los árboles. Pese a los esfuerzos de las personas de la villa, la pequeña jamás apareció.
Pero lo más interesante es que en esta misma región se habla de la “gente del monte”, un grupo humano que mide alrededor de metro y medio y suele evitar a toda costa a los nativos: los caracteriza un rostro rojo. Dichas personas desaparecieron a partir de los 1980’s, cuando muchas de las selvas que habitaban se convirtieron en sabanas.
De existir, es probable que el Didi pronto sufra un destino semejante.
Fuente de imágenes: 1: cryptomundo.com, 2: blog.capcom.com