Justamente es una forma de expresión que se lleva en forma de signo, o grafema, es decir, haciendo uso de letras y abecedarios. En cuanto a su forma física, puede ser impresa, en una revista, un libro, etc., mediante internet (de hecho este artículo es un ejemplo de comunicación escrita).

Ejemplos de comunicación escrita

Pero bueno, sin más andaduras vamso a por los ejemplos de comunicación escrita, mismos que veremos en diversos esenarios y situaciones, pues este tipo de comunicación admite las más diversas formas.

Leer un Libro

Ya lo habríamos enunciado. También puede ser: leer una revista, un semanario, un aunario, una enciclopedia, etc.

Redactar un ensayo

Bien sea para una tarea o para expresar nuestro pensamiento, en forma clara y escueta. También puede ser escribir un artículo, un libro, un post, etc.

Enviar un fax

Realmente en desuso, y bastante. También podríamos decir: Enviar un telegrama… puf… qué obsoleto. Así que mejor cambiémoslo por esto.

Enviar un correo electrónico

Esto sí que está de moda, a a todos nos encanta. Pero ¿qué tal si lo actualizamos más? Enviar un mensaje por Facebook. De seuguro que esto sí nos enloquece (por cierto, no olviden que si dejan al final un comentario en Facebook habrán acometido un ejemplo de comunicación escrita).

Redactar una carta

También podríamos decir que escribir una carta y mandarla por el correo postal. En desuso. Sin embargo, en el mundo laboral son comunes este tipo de comunicaciones, actas, memorandos, etc.

Realizar un informe

Del tipo que sea, tanto a nivel académico como laboral, o simplemente personal.

Hacer un grafiti

Si el mismo es de imagen no será comunicación escrita, sino pictórica. Pero si contiene algún tipo de eslogan, sí que es una comunicación escrita (en todo caso por estos tiempos hay lío, debemos primero averiguar qué zonas son viables para realiar este tipo de expresión y no meternos en algún lío.

Para finalizar, no debemos olvidar que la comunicación escrita puede ser simple o compleja en su mensaje. Es decir: podemos escribir un simple «hola ¿cómo estás?», o hacer realmente un enrevesado libro de legislación o teratología, etc., etc., y adicionalmente plagado de tecnicismos, neologismos, arcaísmos y mucho más.