La Bandera de Dinamarca
La bandera de un país suele ser uno de los elementos más importantes en su orgullo y su sentimiento nacional. En muchas ocasiones, la banderas se han convertido en símbolos de resistencia, en elementos que representan mucho más que los individuos que las portan.
Esta es la peculiar historia de cómo los daneses resistieron a la conquista por parte de Prusia. En aquel entonces, mostrar la bandera danesa estaba terminantemente prohibido, y no era fácil violar esta ley… así que los daneses hicieron lo que cualquiera habría hecho:
Imprimir su bandera… en un cerdito.
Como muchos países, Dinamarca construyó durante un largo tiempo el sentimiento nacionalista y el amor a la patria que en algún momento fueron fundamentales para todas las naciones. Al hacer parte de Europa, también tuvo que vivir la inestabilidad y los constantes enfrentamientos que ocurrieron entre las naciones europeas. Y, como suele ocurrir, esto derivó en algunos problemas.
Tras su derrota en la Guerra de los Ducados en 1864, Dinamarca se vio obligada a entregar a Prusia la región de Schleswig-Holstein… una en la que compartían tanto daneses como alemanes. La derrota dejó hondas marcas en la nacionalidad danesa y creó un sentimiento de dolor que crecería rápidamente en los habitantes de la región que aún se consideraban daneses.
Y ellos, por supuesto, comenzaron a usar cada vez más sus signos daneses y, en particular, su bandera (de la que los daneses siempre han estado bastante orgullosos).
A los dirigentes de Prusia esto no les agradó, y para finales del siglo XIX se había prohibido rotundamente en la región el uso de la bandera danesa. Sin embargo, los daneses de la región no se resignarían fácil y pronto dieron con la solución perfecta: criar un cerdo parecido a la bandera.
El Cerdo de Protesta
Bueno, puede que la solución no fuera perfecta. A decir verdad, es la manera más peculiar que conozca de realizar un acto de protesta simbólica… pero no cabe duda de que fue efectiva.
No se sabe con exactitud cuánto tiempo se demoraron en obtener el cerdito, pero para la segunda década del siglo XX ya se trataba de un animal muy común en las granjas de toda la región. Se trataba de un animal rojizo con una línea blanca que lo cruzaba de arriba abajo, simbolizando la línea vertical y los colores de la bandera danesa: el cerdito incluso tenía una pequeña franja horizontal que encajaba perfectamente con la bandera.
El asunto pronto tomó importancia política y el cerdito de protesta (cuyo nombre oficial es Husum Red Pied) se convirtió en un símbolo del orgullo y la resistencia danesa. Luego de la Segunda Guerra Mundial, lamentablemente, los cerditos comenzaron a escasear (la región ya era definitivamente alemana y los nacionalismos europeos habían decaído mucho luego de las desgracias de la Guerra) y para 1968 se registró el último nacimiento.
En 1984 volvieron a aparecer cerdos con las características del viejo cerdito de protesta. En la actualidad la raza ha vuelto a tomar algo de popularidad, aunque en la mayoría de los animales la línea horizontal ya no está presente.
Fuente de imagen: futilitycloset.com