La comunicación

En este sentido, se puede comenzar por decir entonces que la Comunicación es un proceso humano, en el cual intervienen dos o más personas, con la intención de transmitir un mensaje, buscando entonces que este sea entendido, interpretado, y en algunos casos, respondido. En consecuencia, la Comunicación también puede ser concebida como un sistema social de transmisión e intercambio de información.

Elementos de la comunicación

Igualmente, como todo proceso, la Comunicación también está conformada por un grupo de elementos, entendidos como cada uno de los constituyentes esenciales para que el sistema se desarrolle a perfección. Aunque dentro de la Lingüística, varios son los profesionales que se han dado a la tarea de describir cuáles son los elementos que conforman el proceso de la Comunicación, por lo general se usa el modelo de Comunicación concebido por el lingüista Roman Jakobson, el cual básicamente está constituido por los siguientes elementos:

• Emisor: es la persona o hablante que emite el mensaje.
• Receptor: por su parte, el receptor será el hablante que reciba e interprete el mensaje.
• Mensaje: será la información que el Emisor emite y transmite al Receptor, a fin de que este la entienda.
• Canal: definida como la forma o vía por medio del cual el Emisor envía la información al Receptor. Por ejemplo, si la comunicación fuese oral, se consideraría como medio el aire a través del cual se transmite la voz.
• Código: finalmente, la Comunicación usará un código, a través del cual se ordena y codifica la información (mensaje) para poder ser transmitida del Emisor al Receptor, a través de un canal. De acuerdo a esto, ambos participantes en el proceso deberían conocer el código, para que la comunicación sea posible.

Comunicación escrita

Por otra parte, será necesario pasar revista también sobre la definición de Comunicación escrita, el cual podrá ser descrito como el proceso de comunicación que ocurre por medio de la escritura. Para esto, se necesitará un  canal, casi siempre conformado por el papel, o desde mediados del siglo XX a través de las nuevas tecnología.

Así también, la Comunicación escrita sucederá entre un Emisor y un Receptor que puede que no lleguen a interactuar, e incluso quizás lleguen a vivir en momentos distintos. Igualmente, además del Mensaje, se necesitará un código, por medio del cual escribir e interpretar el mensaje, el cual –como en todo proceso- debe ser conocido tanto por el Emisor como por el Receptor, y que en el caso de este tipo de comunicación está constituido entonces por las distintas letras y palabras que conforman el alfabeto y el idioma en el que se codifique el mensaje.

El código ortográfico

Pensando entonces en la cualidad que tiene la escritura de trasmitirse entre un Emisor y un Receptor –o varios de ellos, pues la comunicación escrita tiene también la cualidad de ser masiva- los cuales quizás no lleguen a conocerse, interactuar o pertenecer al mismo momento histórico, es imprescindible que el código que se utilice responda a la mayor unidad posible. Es decir, que sea manejado de igual forma tanto por quien escribe como por quien lee, para asegurar así la comprensión e interpretación del mensaje.

En consecuencia, los hablantes que hacen uso del Código escrito se encuentran ante el reto de conocer y usar las normas y reglas por las cuales se maneja su funcionamiento, las cuales a su vez son conocidas con el nombre de Código ortográfico. De esta manera, este código ortográfico será el responsable de que la unidad de la escritura se mantenga, permitiendo la comunicación escrita entre hablantes, incluso de distintas generaciones.

En este orden de ideas, bastaría pensar que cada quien tuviese la Libertad de escribir según sus deseos o propias reglas, o cada vez diferente, para darse cuenta de que además de caótico, la comunicación escrita no podría comunicar mensajes entre individuos, pues estos no se entenderían unos con otros. Por ende, hace falta un estándar, es decir, un modelo o código normado, común a todos, que permita entonces la comunicación.

Cómo está conformado el Código ortográfico

Con respecto a cuáles son los aspectos que constituyen un Código ortográfico, básicamente –sin importar el idioma en el que se redacte una comunicación escrita- estará conformado por un conjunto de signos y las normas de funcionamiento que indican tanto cuál es la función de cada uno de los signos, así como los usos que presentan dentro del código ortográfico.

En el caso del Español, el Código ortográfico será dictaminado por la Real Academia Española de la Lengua, y estará constituido por el conjunto de signos ortográficos, sus normas de uso, así como las formas correctas en las que deben ser usadas las distintas letras, según sus diferentes contextos.

De esta forma, en el Código ortográfico se encontrará el correcto uso de la coma (,); el punto (.); el punto y coma (;) los signos de interrogación (¿?); los signos de admiración (¡!); los dos puntos (:); los paréntesis (); las comillas (“”) entre otros, así como las diferentes normas ortográficas inherentes a la correcta escritura y acentuación de cada una de las palabras.

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