Los duendes son seres mitológicos que aparecieron desde hace varios siglos, en algunos relatos escritos en Irlanda. Casi siempre tienen una forma muy parecida a la de los humanos, pero son de menor estatura y suelen ir siempre muy elegantes. Según algunas creencias, ellos se apoderan de los hogares para luego encantarlos, o hacen desaparecer la cosas. A continuación, el enigmático mundo de los duendes.
Son traviesos
Su carácter es muy parecido al de un niño pequeño, son juguetones y en su gran mayoría, muy amigables con los humanos. Ciertos expertos aseguran que su existencia es real y hasta les han tomado fotos con cámaras especializadas.
Les gusta jugar con las cosas de la casa
Algunas personas en Europa, utilizan el término «se lo llevó el duende», cuando se les pierde algo. Quienes creen en su existencia saben que a ellos les gusta cambiar las cosas de lugar, jugar con las mascotas, producir ruidos extraños, etc. Estos sucesos le pueden poner los pelos de punta a muchas personas, pero hay quienes ya se acostumbraron a convivir con ellos y no les tienen miedo.
No se dejan ver de cualquiera
Pareciera que tienen sus preferencias a la hora de intimar con alguna persona, pues en muy escasas oportunidades se dejan ver por un humano, pero cuando sienten que hay uno que los va a comprender, se muestran sin ningún recelo. Aunque se les muestra casi siempre como agradables, su presencia sí es un poco intimidante, afirman los conocedores de fenómenos paranormales, pues quienes los han visto aseguran que no son como un anciano muy pequeño, sino que tienen rostros malvados. Aunque hay diferencias entre gnomos y duendes.
Existen varios tipos
Según algunos estudiosos de lo extraño, los duendes se clasifican en 4 tipos: los gnomos, que son los más viejos y poseen conocimientos elevados sobre los minerales y la naturaleza. Los duendes, que conviven con los humanos y son muy traviesos y hasta malignos; las hadas, que son mujeres pequeñísimas que viven en la flores, mismas que son muy amigas de los gnomos y siempre están juntos. Y los elfos, que son el equivalente masculino de la hadas.
Secretos para atraerlos
Una prestigiosa astróloga alemana, asegura que enterrando 2 monedas doradas en el jardín los traerá en menos de lo que canta un gallo, pues ellos se sienten muy atraídos por el brillo de esos objetos. También colocar un poco de miel en la ventana, así como helechos en la casa. Se debe invocarlos con amor a través de oraciones, para que ayuden a cuidar el lugar y a alejar energías negativas.
Cuidan la naturaleza
En muchas mitologías se destacan por su gran labor para cuidar la tierra y los recursos naturales, en especial los gnomos. Distintos pueblos indígenas le piden permiso a los gnomos antes de arrancar alguna planta o talar algún árbol.
Marcada longevidad
La expectativa de vida de un duende es de 500 años y empiezan a mostrar signos de envejecimiento como los humanos. Entonces, si alguna vez existe la posibilidad de ver uno con la piel muy arrugada, es posible que ya sea un anciano.
Duendes malignos
Estos duendes se distinguen de los demás por su color de piel. Suelen mostrarse negros, azules o con manchas de color violeta. Éstos son extremadamente dañinos y pueden provocar enfermedades.
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