Un origen crítico
El conocido diario colombiano El Espacio, es muy parecido en su historia a la de otros diarios de la región cuyo tema principal es el “amarillismo”. Sólo que en su origen El Espacio era diferente, comenzó siendo un medio periodístico que buscaba criticar lo que hacían los presidentes de turno en la política nacional.
Su primera edición salió el 21 de Julio de 1965 y su director fue el liberal Ciro Gómez Mejía. Para la época era muy difícil que existiera un periódico crítico, independiente y de opinión como el que él se proponía, quería que los lineamientos fueran parecidos al semanario La Calle, fundado unos años atrás por unos liberales que deseaban el poder. La Calle había fracasado y se cerró.
Los periódicos liberales solían criticar al gobierno, mostrar lo que estaba haciendo el pueblo y cosas por el estilo. Al inicio eran antiestadunidenses y buscaban criticar las intervenciones que el imperio hacía en el Caribe. Incluso la primera edición de El Espacio criticó en primera plata la intervención hecha por los marines en República Dominicana.
Un cambio mundial
Con la Guerra Fría todo órgano de opinión que hablara mal del país del norte comenzó a ser presionado, aquí fue cuando el Espacio cambió. No se podía escribir libremente sobre movimientos sociales, el periódico fue agarrando unos lineamientos más neutrales y el día menos pensado había una fotografía de un muerto en primera plana.
Las amenazas de la sociedad que estaba en el poder se hicieron sentir a través de los medios de comunicación. Nadie necesitaba en ese momento malas opiniones del gobierno y El Espacio debió ser advertido para que cambiara de manera notoria sus lineamientos. Era un cambio que toda la sociedad advirtió.
La etapa roja
Con los años del narcotráfico y la violencia el número de muertos aumentó. Eso generó más trabajo para fotografiar y escribir prensa. El periódico tuvo las mejores máquinas para este tipo de temas, los periodistas se movían rápido y podían llegar a unos minutos del crimen, el accidente, etc.
En las primeras planas siempre salía un muerto acompañado de una frase gigante y que describía la situación en tono irónico, las innumerables víctimas de Escobar, especialmente los degradantes asesinatos a políticos de izquierda que eran abaleados en la mitad de la calle, los sicarios que pagaban sus venganzas, los edificios que explotaban por las bombas amedrentadoras, eran algunos de los temas con los que El Espacio se hacía millonario.
Era muy fuerte que la población viera sus muertos en las páginas de un periódico y más porque las descripciones eran muy planas, no se comentaba porqué pusieron la bomba (los temas de trasfondo), sólo interesaba cuánta sangre había ocasionado. Como era un órgano periodístico nadie lo molestaba.
Lo risible era que en las páginas finales del diario siempre salía una modelo. En trajes cortos, a veces sin nada de ropa, la modelo cerraba el periódico. Por estos dos temas, miles de personas compraron el diario hasta convertirlo en el segundo más leído de Colombia durante más de cuarenta años.
Con el tiempo los medios digitales jalaron otros periódicos más críticos y profundos. No se tomaban fotos de los accidentados con la finura con la que lo hacían los periodistas del Espacio. Estos nuevos órganos de opinión buscan que el lector comprenda los diferentes problemas que agobian a la sociedad.
Al ser mucho más barata la venta de estos nuevos periódicos, las personas comenzaron a rechazar el Espacio hasta que ineludiblemente tuvieron que cerrar la fábrica. Fue hace apenas unos años que lanzaron el último tiraje. Por lo menos en su última edición se dieron cuenta del lamentable periódico en que se habían convertido. Para estas fechas se cerró El Espacio para siempre.
¿Por qué empezaron los periódicos amarillistas?
Los periódicos amarillistas son una realidad mundial. En toda Hispanoamérica hay al menos un periódico por país especializado en temas amarillistas. “Ojo” de Perú, “Crónica” en Argentina, “La cuarta” en Chile y “Diario extra” en Ecuador son sólo algunos de ellos. Todos tienen el mismo fin: el alarmismo social.
Creados en épocas de revueltas sociales e inspirados por la prensa norteamericana, estos periódicos acostumbraron a escribir con el peor descaro sobre los más macabros accidentes que podían suceder en las calles de las principales ciudades del continente. El sexo, las drogas y todo el mundo que rodea la delincuencia barrial tiene una parte explicita en dichos diarios.
Pero eso no es nada comparado con los periódicos regionales que actualmente están ubicados en México. Ellos son controlados por la corrupción tan insana que están contagió a todo el país (especialmente el norte de México). Allí se observan periódicos que comienzan las noticias con títulos bromistas sobre narcotraficantes asesinados de las peores maneras.
Fotos de cabezas, de infartos públicos, de hombres colgados de puentes, carros ametrallados, cuerpos fusilados son sólo unas de las fotografías que manejan este tipo de órganos de información. Esperemos que en algunos años los tirajes de estos periódicos sean más críticos.
Imágenes: 1: semana.com, 2: twicsy.com, 3: americaeconomia.com