El Pensante

El gigantesco océano que se esconde bajo la superficie terrestre

Imagen 1. El gigantesco océano que se esconde bajo la superficie terrestre

La llegada del agua

En sus orígenes, según lo que sabemos de la Tierra, esta estaba desprovista de agua. Era poco más que una masa candente, llena de volcanes y roca fundida, que giraba incesantemente en torno al sol. De acuerdo con la versión más aceptada de la formación de los océanos, fue el impacto constante de miles de cometas lo que comenzó, poco a poco, a llenar de agua la árida superficie terrestre y a garantizar las condiciones óptimas para el posterior surgimiento de la vida.
Sin embargo, un grupo de científicos siempre ha considerado que este relato tiene vacíos y que el agua, aunque indudablemente provino del espacio en alguna cantidad, en verdad se originó en el interior del manto terrestre. Esta teoría, considerada marginal hasta mediados de 2014, está tomando más y más fuerza a medida que se descubre que en efecto existen ingentes cantidades de agua ocultas bajo la superficie terrestre.

Un océano subterráneo

El asunto comenzó en abril de 2014, cuando un grupo de científicos de la Universidad del Noroeste, en los Estados Unidos, comenzaron analizar los datos presentados por varios sismógrafos en los que aparecía información que discrepaba con el conocimiento tradicional.
Como en el mundo imaginado por Verne, los datos mostraban que bajo el manto de aquel país se encontraba una capa, a unos 700 kilómetros de profundidad, en la que las ondas rebotaban de manera distinta, desviándose… como si la roca estuviera completamente impregnada de agua.
En efecto, nuevas mediciones comenzaron a indicar con mayor certeza que una inmensa reserva de agua se encontraba 700 kilómetros por debajo de los Estados Unidos oculta en el manto terrestre. Hasta el momento, era la única evidencia que se tenía de un océano subterráneo.
Pero pronto nuevos estudios comenzaron a indicar que no se trataba de un caso específico. Grandes regiones bajo Asia y, en particular, bajo Beijing, mostraron características semejantes. Hasta el momento el agua descubierta equivale aproximadamente al tamaño total del océano ártico.
Imagen 2. El gigantesco océano que se esconde bajo la superficie terrestre

Gráfica que (en inglés) explica las dinámicas de este nuevo descubrimiento

Dinámicas desconocidas bajo la superficie

De acuerdo con los investigadores, podría existir una cantidad impresionante de agua en lo que se ha denominado una “zona de transición” en el manto que en prácticamente todo el mundo parece tener agua bajo su superficie. De acuerdo con el geofísico Steve Jacobsen, pionero en este proyecto, si sólo el 1% de esta zona de transición corresponde a agua existiría bajo la tierra el equivalente a 3 océanos. Una cantidad desde todo punto de vista impresionante, y que bien podría estar siendo subestimada.
Debido a la inmensa profundidad, por ahora resulta imposible aprovechar de manera alguna estas reservas. Así mismo, muchos creen que la actividad volcánica y tectónica mantiene un equilibrio entre los océanos y estas ingentes reservas, haciendo que no crezcan demasiado pero que tampoco se “filtren” a las profundidades. Se calcula que de salir de allí el agua sería suficiente para cubrir toda la tierra con un gigantesco océano excepto por unas pocas cumbres montañosas.
Antes de que todos comiencen a imaginar un mundo subterráneo habitado con criaturas desconocidas, hay que aclarar que de acuerdo con los investigadores el agua no se encuentra pura, sino diluida en la roca en la que ha sido capturada. Por esta razón no es un “océano”, en términos técnicos, sino más bien un “acuífero” lo que se encuentra allí abajo.
Así mismo, queda por determinar si el agua siempre estuvo allí y comenzó a surgir luego de la creación de la Tierra o si llegó de los cometas y fue capturada por el manto terrestre. Por ahora, la mayor parte de los investigadores parece inclinarse por la primera versión.
Fuente de imágenes: 1: www.rt.com, 2: theguardian.com