El sueño de muchas personas sería recibir un salario mensual por no hacer nada, por quedarse en casa y esperar cada mes recibir el pago para irse de paseo o gastarlo en los gustos de su preferencia. Eso no sólo sería lo ideal para muchas personas, sino que ni remotamente protestarían por estar en una situación así.
Pero, no lo mismo se puede decir de Charles Simon, un empleado de una empresa de ferrocarriles en Francia que desde el año 2003, y por lapso de más de 12 años, recibió en forma cumplida la suma mensual de 5496 euros.
Sin embargo, el hombre se cansó de tal situación y a finales de 2015 decidió quejarse ante los directivos de la empresa estatal de ferrocarriles, no por la plata que recibía sin trabajar, sino por cuanto consideraba que él tenía una brillante carrera como ingeniero, misma que le había sido frustrada al dejarlo en casa y no permitirle trabajar.
Pero todo tiene una explicación pues Charles Simon, en el año 2003 descubrió un desfalco por valor de 20 millones de euros. Desde ese entonces sus jefes decidieron que era mejor tenerlo lejos y decidieron mandarlo a casa.
Una vez el caso fue conocido por los directivos de la empresa, tomaron en cuenta su solicitud y decidieron reincorporarlo y asignarlo un cargo a finales de ese mismo año y, aunque no exigieron el reintegro del dinero, sí manifestaron que su postura, por lapso de todos esos años había sido malintencionada.
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