Elyse Pahler
En marzo de 1996 Elyhse Pahler llevaba 8 meses desaparecida. Su familia, desesperada, no perdía la esperanza de que un día volviera a reunirse con ellos.
La habían visto por última vez el 22 de julio de 1995, cuando había salido del hogar sin decirles a dónde se dirigía. Desde entonces cada día era un suplicio, esperando que volviera… o que llegara la cada vez más inevitable noticia de su muerte.
Fue precisamente aquel mes – marzo – cuando las esperanzas de la familia se vieron completamente destruidas. Entonces, llenos de dolor, se enteraron de que el cuerpo de su hija había aparecido cerca de Arroyo Grande, en California no muy lejos del lugar donde vivía. Se encontraba muerta… y en un avanzado estado de descomposición.
Había sido uno de sus asesinos quien llevase al hallazgo del cuerpo: Royce Casey, quien recientemente se había convertido al cristianismo y a quien la culpa había llevado a confesarlo todo. La historia era verdaderamente macabra.
El asesinato
Los 3 asesinos eran conocidos de la víctima, quien incluso había salido con ellos aquella tarde por propia voluntad. Se trataba de Joseph Fiorella, de 14 años, Jacob Delashmutt, de 16, y Casey, quien también tenía 16. Los tres jóvenes habían invitado a la muchacha aquel día a fumar un poco de marihuana en la campiña rural de California.
Sus planes eran mucho más oscuros. Influenciados (según ellos) por las letras de Slayer, los jóvenes habían decidido vincularse al satanismo y estaban convencidos de que ofrecer un sacrificio a Lucifer le traería gloria a la banda. Pero este sacrificio, para ser válido, debía ser humano. Los tres jóvenes llevaban meses hablando del asunto: nadie sabe qué los hizo pasar de la palabra a la acción. En cualquier caso, una vez tomaron la decisión llegó la hora de escoger una víctima.
Y para su desgracia, Elyse fue la elegida.
Una vez la tuvieron lejos de la ciudad, donde no podría pedir ningún auxilio, los jóvenes comenzaron a ahorcarla con correas y la apuñalaron en repetidas ocasiones en el cuello. El forense luego indicaría que ninguna de estas heridas fue mortal por sí misma, lo que significa que se desangró hasta morir, lenta y dolorosamente. Según Casey mientras estaba en el suelo lloraba, oraba a Dios y le pedía ayuda a su madre. Una vez murió, los atacantes la violaron en repetidas ocasiones e incluso retornaron varias veces después con el mismo propósito.
El caso se caracterizó por una extrema crueldad, motivada por los deseos de agradar a Satanás. Los tres jóvenes luego siguieron con su vida y seguramente no habrían sido descubiertos de no ser por la confesión de Casey, 8 meses más tarde.
La demanda
Al ser menores de edad, los 3 jóvenes no fueron condenados a cadena perpetua, sino únicamente a 25 años en prisión. Durante el juicio repetirían con insistencia que habían sido las letras de Slayer las que los habían motivado a realizar este macabro asesinato.
Por esta razón, los padres de Elyse instaurarían una demanda contra el grupo musical por pervertir a los jóvenes e incitar a la violencia. Los jueces, sin embargo, no consideraron que la demanda fuera válida pues aunque fueran obscenas, las letras no indicaban que la persona debía cometer un asesinato. En palabras del juez:
“No hay posición legal desde la que pueda tomarse que haga a Slayer culpable de la muerte de Elyse. ¿Dónde trazar la línea? Podrían bajo esos términos comenzar a revisar cada libro de la librera”.
Eventualmente, Delashmutt confesó que Slayer en verdad no había motivado nada y las autoridades determinaron que fue Joe Fiorella quien organizó todo, pues estaba obsesionado con Elyse… y con su asesinato.
Fuente de imágenes: 1: en.wikipedia.org, 2: complex.com