Nuevas noticias extrañas desde Kazajistán
Para la mayor parte de países de habla hispana, Asia central es un lugar misterioso. Kazajistán, por ejemplo, es un país que muchos conocerán por Borat… y por la aparente abundancia de historias extrañas que de allí emanan.
Hace menos de un mes se descifró, por fin, el llamado misterio de los durmientes. Pues bien, el día de hoy un nuevo evento misterioso ha ocurrido en las campiñas de Bangladesh. Comenzando en la región de Kyzylorda (al sur del país), a finales de junio de este año, una muerte masiva de ganado lanar ha asolado a grandes zonas del país. Bakhyt Žahanov, a cargo del Departamento Regional de Agricultura, hizo sonar las alarmas en la región y comenzó una cruzada contra la muerte de los animales, que tiene asustados a miles de campesinos kazajos.
Una serie de muertes inexplicables
No es la primera vez que algo así ocurre en este país. En mayo de este año más de 100 mil antílopes Saiga perecieron ante una misteriosa dolencia que las autoridades luego identificaron como pasteurelosis, una enfermedad respiratoria. En el caso de las ovejas, se están analizando muestras de tejidos para determinar la causa de la mortandad y aunque las autoridades están tratando las ovejas vivas contra esta enfermedad, nada garantiza que no se trate de una nueva causa. Mientras que los pobladores desconfían de los estudios y culpan a un cohete que se habría estrellado en la región, mientras que algunos académicos afirman que la ola de calor (que hizo que en la región se alcanzaran los 45°C el mes pasado) seguramente debilitó a los animales.
Parece ser que los pobladores kazajos no podrán disfrutar del hecho de que, por fin, los durmientes encontraran la causa de su dolencia. Un problema se soluciona y otro nuevo aparece… en este caso uno que puede amenazar la subsistencia de miles de familias campesinas. Pero, al fin y al cabo, es Kazajistán, el país del misterio, de las minas abandonadas que almacenan gases tóxicos, de los cohetes secretos con cargas no menos secretas que salen de agujeros bajo la tierra y se estrellan en los campos agrícolas. ¿Qué más podría esperarse?
Fuente de imagen: i.ytimg.com